Muere Samuel Ruiz
MÉXICO, D.F., 24 de enero (apro).- Samuel Ruiz García, obispo emérito de San Cristóbal de Las Casas, falleció hoy a causa de una neumonía y otros padecimientos que le afectaban desde hacía tiempo.
La noche de ayer domingo, don Samuel Ruiz recibió los santos óleos de parte de su amigo Raúl Vera, actual obispo de Saltillo y quien fuera su obispo coadjutor en San Cristóbal.
Don Samuel presidió la Diócesis de San Cristóbal durante cuarenta años –de 1960 a 2000--. Y durante la mayor parte de ese periodo implantó ahí la línea pastoral de la opción preferencial por los pobres, emanada del Concilio Vaticano II, de los años sesenta.
De ahí que, a raíz del levantamiento en Chiapas del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), en 1994, Samuel Ruiz adoptara la defensa de la causa indígena, lo cual provocó que tuviera diferencias con altos mandos del Ejército Mexicano, así como con los gobiernos federal y chiapaneco.
Al terminar su periodo como obispo, Ruiz García se fue a vivir a la ciudad de Querétaro, donde residió los últimos 11 años de su vida, al lado de familiares y amigos. Sin embargo, siempre se mantuvo activo en la promoción y defensa de los derechos humanos. En los últimos meses su salud se agravó; padecía diabetes y tenía problemas cardíacos y respiratorios, lo cual provocó que uno de sus pulmones dejara de funcionar.
Trascendió que uno de lo últimos deseos de Samuel Ruiz fue que se le inhumara en la catedral de la Diócesis de San Cristóbal, donde él presidió los llamados “diálogos de paz” entre el gobierno y el EZLN.
Durante el día de este lunes, los restos de Samuel Ruiz serán velados en la capilla del Centro Universitario Cultural, en Copilco. Y luego serán trasladados a la catedral de San Cristóbal, para ser velados ahí durante la noche.
José Herrera Alcalá, uno de los sacerdotes ordenados por Samuel Ruiz y quien continúa trabajando en la Diócesis de San Cristóbal, señala:
“La mayor aportación de Tatic Samuel, como le decían los indígenas, fue haber inculturado el evangelio en la realidad social de los indígenas chiapanecos. Esto, sin embargo, encendió muchas pasiones, y así como le trajo mucho apoyo y solidaridad, también le acarreó muchísimas enemistades”.
--¿Cuál es el ánimo de los sacerdotes de San Cristóbal ante la muerte de don Samuel?
--Nos quedamos huérfanos los sacerdotes que trabajamos con él y que aún continuamos en la Diócesis. Nos embarga un sentimiento de orfandad, pues don Samuel siempre fue un obispo cercano y dialogante con nosotros.
Presidente de la Sociedad Mexicana de Historia Eclesiástica y actual párroco de Petalcingo, Chiapas, José Herrera Alcalá indica que, en la catedral de San Cristóbal, ya está preparada la cripta para inhumar los restos de Samuel Ruiz, donde también descansan los restos de otros obispos de la Diócesis.
Actualmente surgió un proyecto por dividir territorialmente la Diócesis de San Cristóbal y por desmantelar la labor que dejó don Samuel, del cual dio cuenta a fines de diciembre pasado el semanario Proceso.
Este proyecto intentó implementarlo El Vaticano desde los años noventa, cuando su representante en México era el nuncio apostólico Jerónimo Prigione. Sin embargo, el proyecto no cuajó entonces debido al gran apoyo y simpatía que la labor de Samuel Ruiz despertaba en el país y fuera de él.
Ahora, este proyecto es impulsado por el actual obispo de San Cristóbal, Felipe Arizmendi, quien argumenta la necesidad de dividir la Diócesis en dos partes, una de ellas sería otra diócesis con cabecera en Ocosingo.
Arizmendi dijo al semanario que esta división es para que la feligresía tenga una mayor atención pastoral, ya que a menor territorio, mayor atención. Sin embargo, un grupo de sacerdotes –como Joel Padrón y Heriberto Cruz—aseguran que la intención es desmantelar la línea de la opción por los pobres, implementada por Ruiz García (Proceso 1782).
Lo cierto es que, ahora con la muerte de Samuel Ruiz, se prevé que el proyecto de división se concrete con mayor rapidez y sin tantos obstáculos.
Samuel Ruiz nació en Irapuato, Guanajuato, en 1924. Sus estudios eclesiásticos los hizo en el Seminario Diocesano de León. Se le ordenó sacerdote en 1949 y obispo en 1960. Y respecto a su formación académica en Roma, hizo estudios de teología y Sagrada Escritura en la Universidad Gregoriana y en el Instituto Bíblico.
En el año 2000, recibió el premio Simón Bolívar de la UNESCO, por su contribución a la paz y al respeto a las minorías étnicas. Al año siguiente y por los mismos motivos, se le otorgó el Premio Internacional de Derechos Humanos de Nuremberg.
La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, lamentó el fallecimiento de Samuel Ruiz, y señaló que “voces como la de él, valientes, son capaces de levantarse frente a causas que otros consideran perdidas”.
Los restos del obispo serán inhumados al mediodía del próximo miércoles, en la catedral de San Cristóbal. Se esperan concentraciones multitudinarias de las comunidades indígenas, que llegarán a darle su despedida.