CIUDAD JUÁREZ, Chih., (apro).- Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de esta ciudad detuvieron a Soledad Griensen Porras, de 50 años de edad, quien administraba un refugio contra la violencia femenil donde golpeaba y mantenía contra su voluntad al menos a seis mujeres, además de obligarlas a prostituirse. Según una de las víctimas, dichas mujeres, todas madres de familia, llegaron a ese lugar en busca de ayuda y protección, pero la dueña del centro de ayuda, “Mujeres  Unidas  Contra  la Violencia” la sometió a todo tipo de vejaciones. En el informe oficial emitido por la SSPM, la denunciante interceptó una patrulla que realizaba su recorrido de vigilancia en la colonia 9 de Septiembre, para que acudiera al supuesto centro de ayuda donde se estaban cometiendo abusos contra las mujeres. En el refugio localizado en las calles Delicias y Jiménez  de la citada colonia, encontraron a otras cinco mujeres y ocho menores de edad, quienes huyeron de sus casas tiempo atrás para escapar de la violencia, pero en el sitio que se encontraban también sufrían maltrato por parte de la directora del centro. Las presuntas víctimas argumentaron que entre, otros castigos, la mujer acusada untaba chile en las partes íntimas de los pequeños, a quienes también golpeaba y maltrataba. Algunas de ellas, incluso hicieron señalamientos directos contra Griensen, a quien acusaron de prostituirlas con hombres que llevaba al centro y a los que las ofertaba por las noches principalmente y hasta altas horas de la madrugada. Según el reporte oficial, dentro del centro de ayuda se localizó material pornográfico y las personas, al momento de ser aseguradas, refirieron que la directora del lugar las tenía incomunicadas e incluso sin comer. Griensen Porras fue trasladada junto a las supuestas víctimas ante el juez de barandilla en turno del Distrito Universidad, donde la parte acusadora ratificó las quejas y se inició el procedimiento para realizar las indagatorias correspondientes.