CHICAGO (apro).– La Corte Federal del Distrito Norte de Chicago, Illinois, ordenó al gobierno de Barack Obama que permita a la defensa legal de Jesús Vicente Zambada Niebla, El Vicentillo, el acceso a todos los documentos “clasificados”, y decidió postergar la fecha del inicio del juicio contra el presunto narcotraficante mexicano. “La defensa del señor Zambada debe tener acceso a todos los documentos oficiales que ha entregado el Departamento de Justicia a esta Corte, aunque eso no significa que los documentos clasificados deben hacerse públicos”, declaró el juez Rubén Castillo, durante la audiencia celebrada este martes. En la sesión, Alvin Michaelson, uno de los abogados de El Vicentillo, solicitó de manera verbal al juez “anular” el juicio por narcotráfico, tomando en cuenta que el Departamento de Justicia no ha presentado ninguna evidencia sustancial para sostener las acusaciones contra su cliente. “No veo nada por el momento que nos lleve a anular el juicio, por el contrario, creo que esto llevará mucho tiempo, y por ahora se considera que la fecha del 13 de febrero –para el inicio del juicio– tendrá que ser postergada”, dijo el juez Castillo a los abogados de El Vicentillo. La defensa del hijo de Ismael El Mayo Zambada, número dos en el escalafón de poder del cártel de Sinaloa, le dijo al juez que en los próximos días solicitará de manera formal (por escrito) la anulación del juicio, aun cuando la Corte de Chicago ya le adelantó que rechazará el pedido. En la sesión de este martes, la defensa volvió a argumentar que El Vicentillo es inocente de los cargos que se le imputan en Estados Unidos, y que además su cliente “sí recibió promesas de inmunidad” por parte de la Administración Federal Antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés), a cambio de información concerniente a las operaciones de cárteles contrarios al de Sinaloa. “Mi cliente no forma parte de la estructura del cártel y ni estaba a cargo de las operaciones de logística de éste”, subrayó Michaelson durante la sesión ante el juez Castillo. El pasado viernes 2, el Departamento de Justicia entregó a la Corte declaraciones hechas bajo juramento por parte del agente de la DEA, Manuel Manny Castanon, en la que describe una reunión sostenida hace dos años con El Vicentillo, en la que presuntamente no se le hacen promesas de ningún tipo a cambio de la información que el hijo de El Mayo promete entregar. En la audiencia, Michaelson volvió a insistir que la clave del caso de su cliente es que el Departamento de Justicia presente como testigo del juicio a Humberto Loya Castro, presunto representante legal del cártel de Sinaloa e intermediario de éste con la DEA. “Loya Castro ha estado proporcionando información al Departamento de Justicia sobre las operaciones del narcotráfico en México, desde hace 10 años o más. Él es quien sabe todo y es clave para el juicio”, puntualizó Michaelson a la Corte. El juez Castillo ordenó a la defensa de Zambada Niebla que el próximo 19 de enero, a más tardar, entregue su respuesta “sellada” al Departamento de Justicia, con el argumento de que no hay acuerdo de inmunidad con El Vicentillo. La Corte estableció que la próxima audiencia preparatoria para definir la nueva fecha del inicio del juicio se celebre el 25 de enero de 2012. Michaelson solicitó al juez que se considere el traslado de su cliente a otra prisión, porque en la que se encuentra ahora (Milan, Michigan) hace mucho frío y, además, por falta de ropa adecuada El Vicentillo no puede disfrutar el tiempo que tiene para salir de su celda y pasar unos minutos al aire libre en el patio de la cárcel. Jesús Vicente Zambada Niebla –quien presenció la sesión a través de una video-conferencia– sonrió cuando su abogado hizo el pedido de que lo trasfirieran de cárcel. El juez ordenó al Departamento de Justicia que considere la petición de la defensa de El Vicentillo. El abogado del hijo de El Mayo Zambada consideró que la nueva fecha para el inicio del juicio de su cliente podría ser hasta después del próximo mes de mayo, pero adelantó que antes del 25 de enero de 2012 solicitará por escrito y de manera formal la anulación del proceso judicial.