MÉXICO, D.F. (apro).- El padre Alejandro Solalinde Guerra, coordinador de la Pastoral de la Movilidad Humana del Episcopado Mexicano, fue retenido y encarcelado ayer por habitantes del poblado Nuevo Santiago Tutla, en el municipio San Juan Mazatlán Mixe. El religioso y defensor de los migrantes fue retenido durante cinco horas por un grupo de hombres armados que lo encarcelaron en esa comunidad. Solalinde tuvo que ser rescatado por elementos de la Policía Federal (PF) aproximadamente a las 21:00 horas. Los escoltas que acompañaban al sacerdote católico fueron desarmados, sometidos y encarcelados por los pobladores. El religioso explicó que acudió a esa comunidad a visitar a una familia pero al querer retirarse un grupo de personas se lo impidió, argumentando que no podía quitar la cadena del camino porque había prometido que se iba a quedar el año nuevo, “cuando eso no era verdad”. Aseguró que lo metieron a la cárcel alrededor de las 16:00 horas y que posteriormente los habitantes organizaron una asamblea durante la cual lo interrogaron. Solalinde ya interpuso una denuncia ante el agente del Ministerio Público por estos hechos. El padre enfrenta actualmente una demanda de un inmigrante guatemalteco que lo acusó del presunto delito de abandono de personas. El fundador del albergue Hermanos en el Camino fue acusado por el guatemalteco Juan Francisco Silvestre, según consta en la averiguación PGR/OAX/III/220/2011. El 8 de diciembre pasado, Solalinde compareció ante la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) en Oaxaca, para responder a la denuncia. Unas 30 organizaciones no gubernamentales y religiosas han manifestado su apoyo al padre y censuran la “criminalización” de la labor humanitaria que llevan a cabo representantes de la sociedad civil.