MÉXICO, DF, 23 de marzo (apro).- “Sobrecogedor” es un buen adjetivo para definir el argumento de Sin sangre, obra basada en la novela homónima del Alessandro Baricco que, en una traducción, adaptación y dirección de José Caballero y Silvia Ortega Vettoretti, recientemente concluyó su temporada en el Teatro El Granero.

Las acciones ocurren en una calle en alguna ciudad contemporánea, una tarde al inicio de la primavera, donde una mujer camina con paso elegante. A pesar de su edad, la mujer camina erguida y segura, avanza y se detiene frente a un kiosco de lotería, donde ve sentado a un anciano leyendo el periódico.

Ella lo invita a tomar una copa, el anciano se rehúsa, tras la insistencia, él acepta. En el bar, el anciano y la mujer se sientan uno frente a la otra. Tras una intensa charla, el anciano confiesa conocerla; es la mujer que viene a buscar la verdad sobre la noche en que mataron a su padre y a su hermano cuando era niña, acontecimiento sobre el que el anciano y la mujer tienen versiones muy distintas.

A partir de esta trama, Baricco nos ofrece una historia de guerra muy humana, la de una mujer que después de muchos años se reencuentra con uno de los asesinos de su padre, quien al mismo tiempo la salvó a ella de la muerte. ¿Cuál es la actitud que debe tomar, asesinarlo y vengarse, o perdonar a quien, paradójicamente, le debe la vida y seguir adelante?

Se trata de una puesta en escena que representa un gran reto actoral, con diversos saltos en el tiempo que exigen la atención permanente del espectador que, poco a poco, va resolviendo el rompecabezas de una historia donde, como en toda guerra, terminan por desdibujarse los roles de víctima y victimario, en medio de una serie de argumentos que tratan de explicar conductas humanas que podrían parecer inexplicables.

Un elenco de primer nivel, integrado por Lucero Trejo, Silverio Palacios, Juan Manuel Bernal, Carlos Alberto Orozco, Pablo Astiazarán M.,  Miguel Loyo y Miguel Alvarado, imprime gran dramatismo y matices a las imágenes concebidas por  Baricco y traducidas a la escena por José Caballero y Silvia Ortega Vettoretti.

“Ustedes ganaron la guerra y ¿este les parece un mundo mejor?”, es la frase lapidaria con la que el personaje de la mujer, interpretado por Lucero Trejo, cuestiona al anciano, interpretado por Silverio Palacios, acerca de las acciones atroces cometidas muchos años atrás bajo el argumento de la libertad y que derivaron en una guerra fraticida donde finalmente no hubo ganadores.

Alessandro Baricco (Turín, Italia, 1958) ha sido multipremiado como autor de obras como  Océano mar, Tierras de cristal, Seda y City. Igualmente meritoria ha sido su actividad como promotor incansable de la lectura en su natal Italia, además de ser el fundador de una escuela de escritura que, con toda seguridad, dará a luz a varios de los autores italianos que serán importantes en los próximos años.

Después de su exitosa temporada en el Teatro El Granero, con seguridad Sin sangre realizará alguna nueva temporada próximamente en otro escenario de la Ciudad de México.