Detienen a 17 policías de Acámbaro por presuntos nexos con La Familia
GUANAJUATO, Gto., 4 de mayo (apro).- En un nuevo operativo que forma parte de “una estrategia de depuración policial” en la región sur de la entidad, fueron detenidos 17 elementos de la Policía preventiva de Acámbaro, encabezados por el director de la corporación, Pedro Gutiérrez Ávila, quien presuntamente permitía y colaboraba en las actividades ilícitas que en este municipio realiza la Familia Michoacana.
El impresionante despliegue de 320 elementos y 90 unidades de la Policía Ministerial, Federal y fuerzas de seguridad estatales efectuado durante todo el día en Acámbaro, culminó en la detención de más de un centenar de preventivos, de los cuales finalmente 17 confesaron su colaboración con el grupo delictivo o se encontraron elementos que los vinculan en la protección del mismo, señaló el procurador Carlos Zamarripa Aguirre.
Sin embargo, el alcalde perredista Gerardo Silva Campos denunció la práctica de tortura física y sicológica contra los policías preventivos y otros funcionarios públicos que fueron detenidos, y protestó públicamente por la forma en que se aplicó el operativo, pues dijo que se ignoraron las reiteradas solicitudes de coordinación que hizo a las autoridades estatales y que nunca se le informó del mismo.
Mientras que el dirigente estatal del PRD, Miguel Alonso Raya, ofreció todo su respaldo al alcalde Gerardo Silva Campos; y acusó al gobierno estatal de instrumentar a través de la Procuraduría de Justicia un “espectáculo mediático” que, advirtió, podría terminar en “otro michoacanazo”.
“El gobierno estatal debe hablar claro y hacer una investigación seria para que no suceda otro michoacanazo –dijo el líder perredista- . No es necesario tanto show, no nos oponemos a la depuración pero que lo hagan con operación láser, sin escándalo, nadie les impide nada”.
El edil Silva Campos se quejó de que las corporaciones que participaron en el operativo “prácticamente sitiaron la ciudad, cerraron todas las salidas”, lo que causó temor entre la población y la paralización de las actividades cotidianas de la ciudad.
“Hay testimonios de que están siendo sujetos de un interrogatorio exhaustivo; no deberían de querer tratar de sacar la información que quieren a base de golpes, de tortura física y sicológica”, denunció.
“Nuestra situación geográfica está muy cuestionada porque estamos en los límites con Michoacán; ese es otro asunto, pero a otros municipios del norte y centro, con delitos mucho mayores, ni se les ha tocado... ojalá que se aplique con tanto rigor, que se nos trate a todos por igual”, dijo el alcalde de Acámbaro esta mañana.
Es la segunda incursión de este tipo en menos de una semana en una corporación municipal. La primera se efectuó el sábado en Tarandacuao –también en el sur del estado, pero gobernado por el PAN--, donde se detuvo a 23 preventivos también señalados por sus vínculos con la Familia Michoacana, aunque el director de Seguridad Pública logró escapar.
Estos detenidos ya fueron consignados ante el Juez IV de Distrito, ante el cual rindieron su declaración preparatoria este día, mientras en Tarandacuao las familiares de los detenidos salieron a protestar a las calles e interpusieron una queja ante la Procuraduría de los Derechos Humanos, que inició el expediente 42/11-E para investigar las posibles violaciones en que incurrieron los agentes estatales y federales.
Por la tarde, en las instalaciones de la Procuraduría de Justicia, el titular Carlos Zamarripa aseguró que los operativos no tienen ningún tinte de orden político, sino que se trata de una “depuración” resultado varias investigaciones que se iniciaron “hace tiempo”.
Acompañado por el secretario de Seguridad Pública, el general Miguel Pizarro; el delegado de la PGR, Martín Levario, y el nuevo coordinador de la Policía Federal en el estado, Arturo Basols González, el procurador Zamarripa aseguró que el director de Seguridad Pública de este municipio, Pedro Gutiérrez Ávila, admitió y describió la colaboración y permisividad que mantenía con una célula de la Familia Michoacana que opera en la región, con sede en Zitácuaro, Michoacán.
“El director Gutiérrez Ávila, desde hace varios años estuvo girando indicaciones especificas a los mandos y elementos de la policía municipal, en el sentido de permitir el libre tránsito y la realización de actividades ilícitas a los miembros de la familia michoacana, además de brindarles protección, toda vez que era informado previamente cuando habrían de cometer algún ilícito, ordenando a las unidades y elementos a su cargo que se dirigieran a un lugar opuesto de aquel en donde se desarrollaría el ilícito”, detalló el procurador.
Informó que varios civiles que forman parte de la organización criminal también fueron detenidos como parte de la misma investigación, pero “serán presentados posteriormente”.
Aunque el procurador no respondió a los señalamientos del alcalde acambarense por las presuntas prácticas de tortura que habrían sufrido los preventivos y otros funcionarios que fueron detenidos, aun cuando la mayoría de ellos fueron liberados en el transcurso de la mañana.
Eso sí, el procurador dijo que hasta ahora ninguno de los alcaldes de los dos municipios donde se ha intervenido están libres de la investigación que se realiza, y que esta “depuración” continuará en los municipios del sur.