MÉXICO, D.F., 9 de mayo (apro).- Personal del Ejército mexicano irrumpió hoy en las instalaciones de la policía municipal y tránsito de Matamoros, Tamaulipas, y desarmó a 700 elementos de la corporación, con el fin de verificar que las armas de uso oficial no estén involucradas en algún ilícito.

La medida, que no se aplicaba desde 2008, coincide con el hallazgo de las narcofosas y el descubrimiento de casas de seguridad con migrantes retenidos contra su voluntad.

Una de esas casas estaba bajo control de cuatro policías municipales que fueron detenidos la semana pasada. Heriberto Hernández Oliva, Baudel Acosta Bonilla,  José Nieves Aguiñaga Morales y Flavia Elena Cabrera Cruz, ex policías municipales de Matamoros,  estaban presuntamente al servicio del cártel del Golfo y fueron identificados como participantes del secuestro de 68 migrantes.

Gabriel López Ordaz, titular de la SSP local, indicó los efectivos policiacos realizaran su labor de patrullaje desarmados y que únicamente el personal a cargo de su seguridad y del alcalde Alfonso Sánchez Garza, conservarán sus armas.

El funcionario aclaró también que no hay una fecha precisa para que le sean devueltas las armas a los policías.