JALAPA, Ver. (apro).- La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) identificó hoy al presunto responsable de la muerte del periodista Miguel Ángel López Velasco y su familia, registrada el pasado lunes 20. Según el procurador Reynaldo Escobar Pérez, se trata de Juan Carlos Carranza Saavedra, El Ñaca, de 23 años, quien “mantenía serias diferencias” con el columnista del diario Notiver que se edita en el puerto de Veracruz. En un comunicado, el funcionario estatal señaló que, de acuerdo con las investigaciones realizadas hasta ahora, el presunto homicida de la familia López Solano es un sujeto “con un largo historial delictivo en el puerto de Veracruz, con el cual el periodista habría tenido graves diferencias”. Además, dio a conocer que el gobierno veracruzano ofreció una recompensa de tres millones pesos a quien o quienes proporcionen “datos fidedignos” que permitan dar con el paradero del probable homicida, “manteniéndolos en el anonimato para no poner en peligro su integridad”. Y señaló que ya se hizo circular la fotografía, perfil e identidad del presunto asesino, misma que –dijo– ha sido enviada a todas las procuradurías del país y la Interpol, para solicitar su cooperación para dar con el paradero de El Ñaca. Escobar afirmó que continúan las investigaciones en torno del triple asesinato, sin embargo, no podía detallar los avances “para no entorpecerlas”. El procurador estatal también refirió que un grupo de policías ministeriales, encabezados por el subprocurador de justicia zona Veracruz, continúa con “las indagatorias pertinentes en torno al caso”, y hasta el momento, agregó, se ha llamado a declarar a más de 40 personas. La madrugada del pasado 20 de junio, un grupo armado entró al domicilio particular de López Velasco y le disparó a quemarropa. Enseguida asesinó a su esposa Agustina y a su hijo Misael, quien colaboraba como fotógrafo en el mismo periódico donde su padre laboró por más de 30 años. El periodista, conocido como Milo, que perdió la vida junto con su esposa Agustina Solano, y su hijo Misael López Solano, de 21 años, se había especializado en temas policiacos y de narcotráfico.