MÉXICO, D.F. (apro).- Luego de que Francisco Vicente Castillo Carrillo, sobrino de Amado Carrillo Fuentes, fuera asesinado en las cercanías de la comunidad de La Palma, en Navolato, Sinaloa las autoridades se encuentran en alerta por un posible repunte de la violencia en la entidad. El crimen, ocurrido aproximadamente a las 21:00 horas del jueves, activó la “alerta máxima”, de acuerdo con el secretario general de Gobierno de Sinaloa, Gerardo Vargas Landeros, quien indicó que la Policía Ministerial y la Estatal Preventiva se mantienen atentas. El funcionario dijo que la zona del velorio será resguardada por elementos de todas las corporaciones policiacas. “No podemos descartar nada, lamentablemente la experiencia nos dice que cuando alguien es atacado de esa manera las familias que se sienten agraviadas no se quedan de brazos cruzados, hay respuesta”, afirmó por su parte el gobernador Mario López Valdez. Agregó que las corporaciones policiacas están alertas para que no se afecte más la paz y tranquilidad de los sinaloenses con este crimen. De acuerdo con fuentes de la Policía, la camioneta en que viajaba el joven de apenas 18 años habría recibido más de 100 disparos y debido a ello se incendió. Castillo Carrillo iba a bordo de una Cherokee, color tinto, cuando de pronto fue alcanzado por varios sujetos que le dispararon con rifles AK-47, de los conocidos como “cuerno de chivo”. El procurador de Justicia de Sinaloa, Marco Antonio Higuera Gómez, señaló que el cuerpo del joven fue entregado la madrugada de ayer a sus familiares. Amado Carrillo Fuentes fue líder del cártel de Sinaloa. La DEA lo identificó como el capo más poderoso en su época. Murió en 1997, durante una operación fallida para cambiar de apariencia en aras de no ser identificado por las autoridades.