Exige AI respetar derechos de guatemaltecos refugiados en Tabasco
VILLAHERMOSA, Tab. (apro).- Amnistía Internacional exigió a las autoridades mexicanas proteger y respetar los derechos humanos de los campesinos guatemaltecos refugiados en la comunidad Nueva Esperanza de Tenosique, Tabasco, luego del desalojo, detención y traslado de 71 de ellos al centro de migrantes de Tapachula, Chiapas.
Mediante un comunicado difundido hoy, el organismo relató que, según información recibida, policías federales y estatales, así como agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) realizaron el operativo a las cinco de la mañana de este lunes 9 de enero, de forma sorpresiva, que obligó a más de 100 desplazados a esconderse al lado de la frontera, en Guatemala.
Al parecer, dijo, varias de las familias fueron divididas y al menos un niño de 10 años está separado de sus padres, quienes fueron detenidos.
Manifestó que, según testigos, los policías intentaron detener a niños y niñas para obligar a sus padres a rendirse y, al parecer, los que escapaban fueron amenazados con un operativo más agresivo en el futuro.
Después del operativo, los más 100 desplazados que huyeron a Guatemala para evitar la detención regresaron a México a reocupar el campamento que habitaban y que había sido parcialmente destruido. Representantes de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y un defensor de migrantes de Tenosique los han entrevistado:
“Es de grave preocupación que este operativo haya resultado en la división de familias y la desprotección de niños y niñas”, condenó el organismo, al tiempo que recordó que México ha reiterado su compromiso de garantizar los derechos de los niños y niñas migrantes, por lo tanto es esencial que cualquier medida tomada por las autoridades garantice el interés superior de los niños afectados.
“En particular, no se debe efectuar ninguna repatriación sin cumplir las normas internacionales de los derechos de los niños y las niñas”, puntualizó.
Asimismo, pidió que los detenidos tengan acceso a representantes de la CNDH y organizaciones no gubernamentales para corroborar sus circunstancias y verificar que sus derechos no hayan sido violados.
“Amnistía Internacional solicita una investigación imparcial y eficaz de este operativo en contra de esta comunidad vulnerable, que se establezcan los hechos y se determinen las posibles violaciones de los derechos humanos”, demandó.
La organización defensora de los derechos humanos recordó que el 23 de agosto del año pasado campesinos de las comunidades guatemaltecas de Nueva Esperanza y La Libertad, en Petén, fueron obligados abandonar sus tierras por miembros del Ejército y la Policía Nacional de su país.
No recibieron notificación previa del desalojo, ni tampoco alojamiento alternativo y durante el operativo, las casas, escuela e iglesia de la comunidad fueron incendiadas.
A consecuencia del desalojo, los 300 habitantes de la comunidad, entre ellos un centenar de niños y niñas y mujeres embarazadas, buscaron refugio al otro lado de la frontera con México, en la comunidad de Nueva Esperanza del municipio de Tenosique, Tabasco, donde, desde entonces, “han vivido en condiciones precarias mientras buscan negociar un retorno seguro a su país y tierras”.