Faltan Legionarios a audiencia contra presunto hijo de Maciel

martes, 27 de noviembre de 2012 · 20:25
MÉXICO, D.F. (apro).- El juicio contra Raúl González Lara, presunto hijo de Marcial Marciel, acusado de tentativa de extorsión, tuvo que aplazarse porque los cinco testigos, todos de la orden de los Legionarios de Cristo, faltaron a la audiencia programada en el Juzgado Tercero Penal, con sede en el penal de Barrientos, Estado de México. Se trataba de la segunda audiencia del caso, pero los testigos, entre quienes figuraba el rector de la Universidad Anáhuac del Norte, Jesús Quince, nunca llegaron. Guillermo Pasquel Hernández, abogado defensor de González Lara, dijo que la ausencia de los testigos sienta un precedente, pues se les citará por segunda vez con la premisa de que si vuelven a faltar se les impondrá una multa de entre 10 y 30 días de salario mínimo vigente en el Distrito Federal. González Lara, quien ha denunciado que fue víctima de violación por su propio padre, el fundador de los Legionarios, Marcial Maciel, lamentó junto con su abogado que los testigos, quienes, a su vez, son parte acusadora en el juicio, no asistieran. Consideró que la ausencia tiene como objetivo alargar más el procedimiento penal que González Lara enfrenta en libertad bajo caución. El juez de la causa programó para el 12 de diciembre la próxima audiencia. Raúl González Lara fue detenido por la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) el 22 de octubre en Cuernavaca, Morelos. Luego de permanecer más de 30 horas en el penal de Barrientos, quedó en libertad al pagar una fianza de 47 mil 499 pesos. Para el hijo de Marcial Maciel y su abogado, se trató de una venganza de los Legionarios luego de que éste presentara una denuncia penal, el 27 de julio de 2010, en una corte superior de New Haven, Connecticut, Estados Unidos, en contra de la poderosa organización. González Lara acusó a los Legionarios de haber tenido conocimiento de los abusos cometidos por el fundador de la orden y no haber hecho nada por impedirlo. En respuesta, los Legionarios acusaron a González Lara de haberles exigido 27 millones de dólares a cambio de su silencio y no presentar ninguna denuncia.

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