MONTERREY, N.L. (apro).- Criminólogos del país pidieron al presidente Enrique Peña Nieto que defina la manera en que cristalizará el recién presentado plan anticrimen porque hasta ahora, advirtieron, no hay una explicación sobre la forma en que se alcanzarán las metas propuestas.
Asimismo, consideraron indispensable que un criminólogo se ocupe de conducir el plan anticrimen con el que el mandatario priista busca regresar la tranquilidad a las familias y recomponer el tejido social.
Al analizar la iniciativa presentada el pasado lunes por Peña Nieto, Ramiro Ramírez Pérez, presidente del Colegio de Licenciados en Criminología de la República Mexicana, dijo que el plan debe atender necesidades particulares en cada una de las regiones del país que tienen problemáticas de inseguridad muy particulares.
“En cada estado, ciudad, municipio y colonia debe haber un diseño particular de estrategia. En Nuevo León hay dos municipios conurbados vecinos, San Pedro, que es rico, y Santa Catarina, que es pobre. Se necesitan dos estrategias completamente diferentes, no se puede dar una medicina genérica para todos los ciudadanos”, dijo.
Ramírez Pérez, quien fue director de la Academia Regional de Seguridad Pública en el noreste del país, dijo que el encargado de la estrategia, que hasta ahora no ha sido presentado, debe tener conocimientos en la materia y no ser un político, pues un manejo partidista del plan lo condenaría de origen.
Al pedir que el gremio que representa sea consultado para aportar ideas en la más reciente cruzada nacional contra el crimen, Ramírez Pérez consideró que el profesionista ideal para el puesto es un criminólogo, que conocería la problemática relacionada con el delito.
“Los encargados del plan deben tener un perfil profesional que los acredite como expertos universitarios en esta ciencia de la criminología. Los abogados tienen la patente de conocimiento en leyes, pero el licenciado en criminología ha estudiado las conductas antisociales, su prevención y su control”, opinó el doctor en criminología por la Universidad Complutense de Madrid.
En anteriores programas contra el delito, dijo, se ha olvidado que la prevención del delito no puede imponerse, sino que debe ser un acto de convencimiento que debe difundir la autoridad entre la sociedad.
Señaló que los criminólogos en el país, que respaldan el plan anticrimen, esperan que la propuesta no tenga un alcance únicamente sexenal, como ha ocurrido con anteriores planes que terminan como catálogo de buenas intenciones.
“No se trata de vencer, sino de convencer en esta nueva estrategia. Las conductas antisociales nunca van a desaparecer porque son parte del comportamiento del ser humano, solamente se pueden prevenir abatiendo las causas, yendo directamente hacia éstas y controlándolas a través de la fuerza pública”, señaló.
Ramírez Pérez consideró que el expresidente Felipe Calderón equivocó el enfoque del combate al crimen al dedicarse, principalmente, luchar contra el crimen organizado, sin considerar los delitos de orden común, que son los que más lastiman a la población en general.
Aunque los secuestros y los homicidios relacionados con los cárteles, son los considerados de “alto impacto” la mayoría de los mexicanos sufren por delitos del fuero común como robos a casa habitación.
El catedrático de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Nuevo León dijo que en enero próximo el Colegio que preside convocará a los criminólogos de todo el país para que trabajen en torno a mesas de diferentes temas coordinadas por especialistas en seguridad y el crimen.
Los resultados, que deberán estar listos para la segunda quincena de ese mes, serán entregados a quien sea designado coordinador del programa anticrimen.
Ramírez dijo que el Colegio está integrado por unos 10 mil criminólogos.