MÉXICO, D.F. (proceso.com.mx).- A 15 años de la masacre de 45 personas en Acteal, Chiapas, la organización Amnistía Internacional (AI) pidió a las autoridades estatales y federales justicia y reparación a las víctimas. En un comunicado, AI señala que “el recuerdo de esta masacre permanece como uno de los momentos más oscuros de la historia reciente de México”. La organización recordó que el 22 de diciembre de 1997, 45 indígenas tzotziles, principalmente mujeres y niños que integraban la organización de la sociedad civil “Las Abejas” fueron asesinados en Acteal, municipio de Chenalhó, en el estado de Chiapas. AI indica que las mismas autoridades que habían armado y entrenado a miembros de grupos armados ilegales responsables de esta matanza, fallaron además en su obligación de evitarla. Agrega que tras 15 años continúan fallado en su obligación fundamental de investigar de forma independiente estos hechos y llevar ante la justicia a todas las personas responsables de los mismos. “El recuerdo de esta masacre permanece como uno de los momentos más oscuros de la historia reciente de México. Los fallos de las autoridades para esclarecer los hechos, llevar a todas las personas responsables, por acción u omisión, ante la justicia y proporcionar reparaciones adecuadas a las víctimas no hacen sino acrecentar esta oscuridad”, afirma Amnistía en el comunicado. Según la organización, desde 2009 la Suprema Corte de Justicia de la Nación decidió liberar a las personas acusadas de haber participado en la masacre debido a irregularidades en el proceso judicial, que habían sido previamente señaladas por diversas organizaciones sin que la Procuraduría General de la República actuase para corregirlas. Considera que esta decisión muestra una vez más las serias deficiencias del sistema de justicia mexicano para investigar, perseguir y castigar a las personas responsables de graves violaciones de derechos humanos garantizando un juicio justo. Finalmente hace un enérgico llamado a las autoridades estatales y federales para exigirles que cumplan con su obligación de asegurar el acceso a la verdad, justicia y reparación a las víctimas de la masacre de Acteal. Sin justicia en este y en otros casos, las autoridades condenan a las comunidades al miedo y el peligro de más violencia.