MÉXICO, D.F. (apro).- La sombra de 2006 –campañas electorales agresivas y “sucias”; resultados de la elección presidencial cuestionados; un árbitro electoral que no dio certeza de imparcialidad-- se hizo presente hoy en los Talleres Gráficos de México, en el inicio formal de la impresión de más de 248 millones de boletas que serán utilizadas en la jornada comicial del 1 de julio próximo. El presidente del IFE, Leonardo Valdés Zurita, así como el consejero electoral Alfredo Figueroa, presidente de la Comisión de Capacitación y Organización Electoral, se encargaron de asegurar, así fuera elípticamente, que no se repetirá la experiencia de hace seis años. Para ello, no se escatimarán recursos de ningún tipo y en ninguna etapa del proceso, desde la elaboración del papel seguridad en que se imprimirán las boletas electorales, hasta la presencia del Ejército, en la custodia de las mismas, igualmente en todas las etapas del proceso. “El IFE está preparado para organizar elecciones limpias e imparciales, y contribuir a la consolidación de una democracia de mayor calidad”, dijo Valdés Zurita. “El próximo primero de julio habrá sufragio efectivo”, aseguró enfático. Todo su discurso –como el del consejero Figueroa--, si bien centrado en las nuevas boletas electorales, sus múltiples características de seguridad y la protección que de ellas harán las fuerzas armadas, tuvo el propósito de mandar el mensaje de que el IFE pondrá su máximo para no permitir las viejas irregularidades que se presentan el día de la elección. “Hemos fortalecido y depurado (los) procedimientos vinculados a la emisión y recepción del sufragio”, dijo y señaló que “las medidas de seguridad que imposibilitan la reproducción de la boleta electoral han dado mayor certeza a los contendientes y a los ciudadanos.” La boleta electoral, dijo Valdés, es el principal instrumento del principio democrático cuyo cumplimiento el IFE velará, y que es el de un ciudadano, un voto. Y se comprometió a que el del 1 de julio de 2012, será, efectivamente, como ordena la Constitución, un “voto universal, libre, secreto, directo, personal e intransferible”. Al consejero electoral Alfredo Figueroa, en su calidad de presidente de la Comisión de Capacitación y Organización Electoral del IFE, le correspondió detallar las características de las boletas electorales que se usarán el primer domingo de julio próximo. Antes, definió: “La producción de la boleta electoral –que inició hoy y concluirá el 31 de mayo-- representa y simboliza el compromiso del IFE por contribuir al desarrollo de nuestra vida democrática porque concreta, nada menos, que el derecho de elegir y ser elegido.” También: “Es por ello, y por las condiciones de nuestra historia electoral, que el IFE ha determinado nuevamente, que su elaboración se realice con los más estrictos estándares de calidad y seguridad, a través de la experiencia y profesionalismo de Talleres Gráficos de México (TGM) y con la colaboración de custodia por el Ejército Mexicano.” Los detalles, según el consejero Figueroa: “El papel seguridad con el que se elaboran, contiene fibrillas ópticas y el emblema del Instituto en marca de agua y una composición de atributos en el material de su producción; además de ello, en los talleres se añade una microimpresión de textos al momento de su impresión, así como un contenido que sólo puede ser observado con un decodificador; contiene, además, elementos de tinta invisible; y caracteres especiales. “Estas medidas de seguridad –continuó-- además de ser supervisadas por personal de nuestra institución y de Talleres Gráficos de México, deberán ser verificadas en tres momentos del proceso electoral por los integrantes de los trescientos consejos distritales: “a) antes de la entrega de material y documentación a los presidentes de mesa directiva de casilla; b) durante la jornada electoral, y c) el día del cómputo distrital. “Para tales efectos, el Consejo General aprobó el 29 de febrero del este año, el procedimiento que habrá de utilizarse para verificar las medidas de seguridad en la documentación electoral y en el líquido indeleble, estableciendo en el acuerdo los pasos que habrán de seguir los responsables en los momentos precisos para la obtención aleatoria de las muestras mediante un sorteo a celebrarse en el pleno del propio Consejo.” También dio Alfredo Figueroa algunas cifras relevantes de la producción de boletas iniciada hoy: “Para cada una de las elecciones que celebraremos --presidente, senadores y diputados-- se imprimirán 82 millones 678 mil 860 boletas electorales. Produciremos un millón doscientos tres mil ciento noventa y dos actas. Las actas se producen en papel autocopiante para garantizar que cada copia es idéntica al original. El tiempo de producción será hasta el 31 de Mayo. Además, Talleres Gráficos producirá un conjunto de materiales complementarios para el proceso electoral. Aseguró el consejero que “el IFE ha trabajado escrupulosamente a lo largo de los últimos tres años para que este ejercicio de nuestros derechos se realice en las mejores condiciones posibles, observando en todo tiempo en nuestras determinaciones, los principios de certeza, imparcialidad, legalidad, independencia y objetividad conforme al mandato constitucional.” Se dio tiempo el consejero Figueroa para reflexionar sobre el dilema de “votar o no votar”: “Frente a la narrativa de la violencia y la inseguridad, es importante insistir que nuestra historia, como las de muchas otras naciones, ha encontrado en la democracia y en el derecho al voto libre, la manera pacifica para construir colectivamente nuestro destino. “Son muchas y entendibles las razones de diversas comunidades respecto del rechazo al voto como mecanismo de transformación, pero no es a su margen como la historia nos ha enseñado que podemos cambiar nuestras condiciones por la vía pacifica. “No podemos olvidar el enorme esfuerzo que ha sido construir nuestros avances democráticos a lo largo de más de un siglo. No basta, desde luego, con votar para avanzar democráticamente; pero no hacerlo, es un mecanismo desfavorecedor de las condiciones de desarrollo político para edificar un Estado democrático de derecho.” Emotiva la ceremonia. En el presidium, el consejero presidente, el director de Talleres Gráficos de México, los consejeros Figueroa y Sergio García Ramírez. Frente a ellos, representantes de los partidos en el IFE, invitados y representantes de los medios de comunicación. En el entorno, empleados y obreros de los TGM y, muy visiblemente, soldados que custodiarán la producción de las boletas Al término de los discursos, Leonardo Valdés Zurita protagonizó el acto simbólico: apretó el botón que puso en marcha la impresionante maquinaria que hará posible la impresión de 248 millones 36 mil 580 boletas electorales; un millón 203 mil 192 actas electorales; casi 4 millones 742 mil documentos con emblemas de los partidos políticos, y 60 mil boletas electorales para los mexicanos que viven fuera del país, repartidos en 113 naciones. Concluido el acto –previo recorrido de los consejeros por las instalaciones de los talleres--, Valdés Zurita, abordado por los reporteros, detalló que el Ejército Mexicano ha custodiado desde la producción del papel seguridad en el que se imprimirán los materiales electorales y también vigiló su traslado a los talleres. “Y por supuesto que ellos nos van a acompañar también a hacer el trabajo de custodia, porque los vamos a distribuir a los 300 distritos electorales y ahí en los distritos electorales también el Ejército y la Armada de México se van a quedar para custodiar estos materiales”, dijo. También dijo que aun los lugares de mayor incidencia delictiva contarán con el material electoral. “En todo el país, en los 300 distritos, nosotros trasladamos las boletas custodiados por el Ejército Mexicano en vehículos con medidas de seguridad especiales, localizables por sistemas de seguridad, de tal suerte que el pueblo de México puede estar tranquilo: vamos a tener una muy buena jornada electoral, con boletas bien hechas, con boletas bien producidas y, además, todo el tiempo custodiadas por el Ejército.”