PGR entrega a "El Grande" a la DEA
MÉXICO, D.F. (apro).- El gobierno de México extraditó este martes a Estados Unidos a Sergio Villarreal Barragán, "El Grande", quien fuera operador del cartel de los hermanos Beltrán Leyva.
Villarreal fue enviado en un avión de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) que aterrizó este martes en el hangar de la Procuraduría General de la República (PGR), que estaba protegido por efectivos de la Policía Federal.
De acuerdo con ese procedimiento, Villarreal podría convertirse en testigo protegido de la DEA, como lo fue de la PGR para declarar en contra de varios funcionarios como supuestos protectores de narcotraficantes.
Entre ellos, implicó al general Mario Arturo Acosta Chaparro, asesinado el pasado 20 de abril en la ciudad de México y quien entre 2000 y 2007 estuvo encarcelado acusado de proteger al cartel de Juárez, cargo del que fue exonerado.
Después de su liberación, Acosta Chaparro se convirtió en el enlace informal del gobierno de Felipe Calderón con los diferentes carteles del narcotráfico (Proceso 1768 y 1779).
Según una filtración del expediente de "El Grande" a la prensa, Villarreal Barragán acusó a Acosta Chaparro de haber recibido por lo menos medio millón de dólares por parte de los hermanos Beltrán Leyva, que en 2008 rompieron la alianza con el cartel de Sinaloa al acusar a Joaquín El Chapo Guzmán de haber entregado al Ejército a su hermano Alfredo, "El Mochomo".
El Grande fue aprehendido en septiembre de 2010 por elementos de infantería de Marina en el fraccionamiento residencial Puerta de Hierro, en la ciudad de Puebla. Policía judicial en Coahuila y agente de la PGR en los años 90, su detención ocurrió cuando sostenía en los estados de Morelos y Guerrero una fuerte confrontación con Edgar Valdez Villarreal, La Barbie, a quien responsabilizaba de haber entregado a Arturo Beltrán Leyva, El Barbas, cuando la Marina lo acribilló en Cuernavaca en diciembre de 2009.
La Barbie fue detenido en el estado de México en agosto de 2010 por la Policía Federal, dependiente de la secretaría de Seguridad Pública, y está en trámite su extradición a Estados Unidos, solicitada por la Corte del Distrito Norte de Georgia, en Atlanta.