LOS ÁNGELES, CALIFORNIA, (proceso.com.mx).- Fuera de agenda, el grupo de víctimas mexicanas que integran la Caravana por la Paz se hizo presente en la sesión de concejales de la alcaldía de esta ciudad para demandar la responsabilidad del gobierno de Estados Unidos en la guerra contra las drogas en México. Por cerca de diez minutos, el poeta Javier Sicilia habló en la sesión de los concejales para pedir al gobierno de Barak Obama defender la democracia que heredaron de los fundadores de los Estados Unidos. Mientras que afuera se realizaba un mitin vigilado por la policía, adentro del salón Sicilia dijo que la Caravana por la Paz no tiene la intención de demandar la suspensión de la venta de armas, sino el tráfico ilegal de las mismas hacia México. Ante los concejales, acompañado por varias de las victimas, el poeta dijo: "vamos a pedirles a los gobiernos de este país que asuman su responsabilidad para detener este dolor. Las drogas no es un problema de seguridad nacional, es un problema de salud pública. Las armas no es un asunto de seguridad nacional, lo es el tráfico ilegal de estas armas de exterminio". Ante el silencio de los concejales que dieron la oportunidad de hablar al poeta a petición del concejal Jose Wissar, de padres zacatecanos, Sicilia dijo que la guerra contra las drogas atenta contra la democracia y los invitó a defenderla. El concejal Wissar dijo que este tema debe estar en la agenda de los candidatos a la presidencia en Estados Unidos y pidió al presidente Obama hacer un pronunciamiento. Dijo que él apoyara una resolución para que se discuta el tema en el congreso de California porque la guerra contra las víctimas es un problema de los Estados Unidos.