"Fue un error método de elección del candidato de la izquierda": Cárdenas
MÉXICO, D.F. (apro).- A toro pasado, el tres veces aspirante presidencial y primer jefe de Gobierno del Distrito Federal de la izquierda en la capital del país, Cuauhtémoc Cárdenas, autoexamina el proceso interno por medio del cual resultó electo Andrés Manuel López Obrador como candidato presidencial, el futuro de la izquierda, lo que viene para Enrique Peña Nieto y del movimiento #YoSoy132.
Directo, sin rodeos, afirma que fue un error el método de selección del candidato presidencial de la izquierda; niega pronunciarse sobre si Marcelo Ebrard hubiera sido mejor aspirante; lamenta la partida del tabasqueño del PRD; asegura que el presidente electo Enrique Peña Nieto tiene un camino complicado y alaba el surgimiento del movimiento #YoSoy132.
Entrevistado al término de la presentación del documental El ingeniero, realizado por el cineasta Alejandro Lubezki, Cárdenas sostiene que la izquierda cometió un craso error al permitir que mediante una encuesta se definiera el candidato a la Presidencia entre López Obrador y Ebrard Casaubón.
“El PRD aceptó una encuesta para decidir un asunto tan importante. Fue una encuesta que se acordó entre López Obrador y Ebrard, lo resolvieron entre dos, no fue una cuestión del partido o de los partidos de la coalición, y ese fue un error”, dice.
Sin embargo, se resiste a opinar si Ebrard hubiera sido un mejor candidato presidencial de su partido.
Desde su óptica personal, hubo encuestas a lo largo de la campaña que desde un principio apuntaban al orden en que llegarían a las elecciones los cuatro candidatos contendientes por la Presidencia.
“Se puede creer o no en las encuestas, pero lo cierto es que todas señalaron semanas antes del resultado final cómo se iba a dar el orden de los votos”, subraya.
Y añade:
“No hay que pensar en el ‘si hubiera sido tal candidato’, a lo mejor en otras condiciones se pudo haber ganado la elección, pero finalmente el Movimiento Progresista tuvo el candidato y los votos que tuvo, así se dio la elección y no hay que darle muchas vueltas”.
Sobre la decisión tomada por el tabasqueño, Cárdenas asegura que lamenta su salida del partido que ambos fundaron: “Le deseo buena suerte, pero no le deseo que le gane al PRD.
De Peña Nieto, dice que encontrará muchos problemas en el país “y ojalá tenga la sensibilidad y responsabilidad para resolver con efectividad asuntos como la violencia, el desempleo, etcétera”.
De su partido, el exmandatario capitalino reconoce que ha cometido muchos errores, aunque aclara que confía en que los rectificará y se fortalecerá.
“El PRD tendrá que apretar el paso y buscar tener presencia donde no la tenía electoralmente antes, afiliar más gente, superar conflictos internos, que no prevalezcan las tribus en las decisiones, lo que es una responsabilidad no sólo del dirigente sino de todos sus militantes”.
El filme sobre Cárdenas aborda la elección que perdió en 2000 frente al panista Vicente Fox.
Sobre ello, dice que no hubo fraude y que los resultados de aquel proceso así lo demostraron.
“Fox hizo una buena campaña, obtuvo el voto mayoritario. A veces no se encuentra explicación para los hechos políticos, pero no hubo nada oculto, yo hubiera querido ganar pero no se dieron las circunstancias. La elección no la gané y de eso estoy convencido”.
En la conferencia, Cárdenas dedica algunas palabras al movimiento #YoSoy132.
“Lo importante es que se manifiesta en contra de un modelo de desarrollo excluyente socialmente, que no genera crecimiento económico y expulsa a muchos mexicanos del país, así como que se propague la violencia y haya territorios en control de los criminales”.
Además, expresa la necesidad de que el movimiento juvenil mantenga su organización, la fortalezca y se amplíe “al margen de los partidos políticos y más allá de las tendencias electorales”.
“A nosotros nos toca apoyar las causas, no meternos, no pretender ser las cabezas de ese movimiento, sino apoyarlo”, subraya.
Lubezki dio a conocer que el documental se concentró en la campaña proselitista de Cárdenas en las elecciones presidenciales de 2000, debido a que fue el periodo en el que a él le tocó votar por primera vez y aún no se dedicaba al cine en forma profesional.
Confesó que tuvo facilidad debido a la amistad que mantiene con los hijos del líder moral del PRD y que grabó más de 400 horas, de las que sólo quedaron dos.
“Es un documento de un evento histórico y semiolvidado, el cual realicé sin patrocinadores y tardé 10 años en concluirlo”, confesó el cineasta.