SAN LUIS POTOSÍ, S.L.P. (proceso.com.mx).- Un grupo de sicarios acribilló a siete jóvenes que estaban reunidos después de jugar futbol, en hechos ocurridos en la colonia Cactus, en el municipio conurbado de Soledad de Graciano Sánchez.

Los presuntos homicidas aparentemente llegaron a buscar al tendero del lugar por un asunto de drogas y los jóvenes –entre ellos un menor de 12 años– se encontraban reunidos, algunos bebiendo cerveza.

En el cuerpo del menor de 12 años dejaron clavada una cartulina con un desarmador, advirtiendo que eso les pasaría a quienes siguieran con el “50”, y firmada por “Los Zetas”.

La Procuraduría de Justicia y la Secretaría de Seguridad Pública reportaron el ataque en la calle Desierto del Sahara, entre las 16:00 y 17:00 horas.

Según las autoridades, las siete víctimas –de 37, 30, 24, 21, 18, 16  y 12 años– habían jugado futbol y posteriormente se reunieron en la esquina de las calles Desierto del Sahara y Camino antiguo a Rioverde, cuando llegaron al lugar dos vehículos, un Jetta dorado y un Honda Accord gris, de donde descendieron varios hombres armados.

Fue entonces cuando los siete corrieron hasta la vivienda ubicada en el número 2089 de la calle Desierto del Sahara, hasta donde fueron alcanzados y masacrados. Tres de los cuerpos de las víctimas quedaron en el interior y los otros cuatro sobre la vía pública.

En fotografías que comenzaron a circular en redes sociales, se pueden ver varios cadáveres sobre unos escalones en la entrada del inmueble.

“Civiles balacean a 7 en colonia Cactus”, informó inicialmente la Procuraduría en su portal de Facebook, donde advirtió del operativo con los peritos y el agente del Ministerio Público para hacer el levantamiento de los cuerpos y asegurar el lugar.

Horas más tarde, la dependencia precisó la identidad y edades de las víctimas, así como el hecho de que se dejó una cartulina en el cuerpo de uno de ellos, misma que fue recogida por un policía preventivo, y más tarde entregada a las autoridades ministeriales.

Un helicóptero de la SSP se mantuvo sobrevolando la zona  mientras las corporaciones estatales mantenían cercadas las calles aledañas.