MÉXICO, D.F. (apro).- La Guardia Costera de Estados Unidos suspendió hoy la búsqueda de dos de los cuatro pasajeros del Learjet 35, matrícula mexicana, que se accidentó frente a las costas de Fort Lauderdale, Florida, el pasado martes 19. La aeronave se dirigía a Cozumel, Quintana Roo, en una misión médica y acababa de dejar a un paciente en Fort Lauderdale cuando se produjo el percance a un kilómetro y medio de la costa de Fort Lauderdale, luego de seis minutos de haber despegado del aeropuerto ejecutivo de esa ciudad. Marilyn Fajardo, vocera de la Guardia Costera, dijo que las labores de rescate concluyeron a las 17:28 horas del jueves 21, luego de recorrer 10 kilómetros cuadrados en aguas de la costa del sur de Florida. “Desafortunadamente no encontramos a las otras dos personas", dijo, que son el capitán y piloto, José Hiram Galván de la O y el médico Fernando Sentiés Nieto. Fajardo precisó que ya habían pasado más de tres días y las condiciones del mar se deterioraron en las últimas horas. Los cuerpos de las dos personas recuperadas corresponden al copiloto Josué Buendía Moreno y el otro a la enfermera Mariana González Isunza. El piloto reportó la falla de un motor antes del desplome. Ahora, investigadores del Departamento de Seguridad en el Transporte (TSB, por sus siglas en inglés) trabajan en la zona para determinar las causas del accidente. Unos 30 buzos voluntarios, en coordinación con la oficina del alguacil del condado Broward, colaboran en las labores de recuperación de los restos del avión. Según Fajardo, la mayor parte del fuselaje de la aeronave no ha sido recuperada. Los dos motores y la caja negra son claves para determinar la posible falla. Según un portavoz del TSB, en 10 días podrían tener un informe sobre las causas del incidente. Por su parte, el cónsul de México en Miami, Francisco de la Lama, dijo que ya se realizan los trámites para repatriar los restos de los dos mexicanos muertos.