Por homicidios, decreció en México la esperanza de vida
MÉXICO, D.F., (apro).- La perspectiva de esperanza de vida en México decreció de 2005 a 2010 a causa, principalmente, del índice de homicidios registrados por la violencia.
Así lo señaló el director del Centro de Investigación en Sistemas de Salud del Instituto Nacional de Salud Pública, Rafael Lozano Ascencio, al dictar la conferencia “La carga de la enfermedad, las lesiones y los factores de riesgo en México y las prioridades en salud”.
El especialista destacó que en la historia sólo se tenía presente como periodo de pérdida en las expectativas de vida los años de la Revolución Mexicana, donde el alto nivel de muerte, la disminución de nacimientos y la proliferación de enfermedades afectaron el índice demográfico.
De acuerdo con expectativas del Consejo Nacional de Población (Conapo), el fenómeno regresivo necesitará de cinco años para su recuperación, aunque otras estimaciones consideran más tiempo.
En su conferencia, convocada por el Doctorado en Ciencias en Salud Colectiva y la Maestría en Medicina Social de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Xochimilco, Lozano Ascencio definió la carga de enfermedad como un esfuerzo científico sistemático para cuantificar la magnitud comparativa de las pérdidas de salud por enfermedades, lesiones y factores de riesgo por edad, sexo y zona demográfica.
Comentó que las variaciones de las cargas de enfermedades son determinadas a través del tiempo por los elementos tecnológicos, los factores demográficos, epidemiológicos, envejecimiento, y el crecimiento de la población.
En un comunicado de la UAM, el especialista resaltó que la aplicación de una sola metodología en las naciones del mundo permite demostrar la transición de las cargas de enfermedades, determinándose hoy con certeza un incremento de las no transmisibles y del número de discapacitados.
López Ascencio resaltó que el combate de las enfermedades no infecciosas relacionadas con la nutrición presenta avances de desarrollo significativo, pero en el caso de las consideradas no trasmisibles ha aumentado 50% de 1990 a 2010, y los casos producto de lesiones se han mantenido estables.
En cuanto a los índices de decesos en ese mismo lapso, agregó que disminuyó en 60% la mortalidad en los niños menores de uno y de uno a cuatro años de edad, y también ha decrecido en el caso de las mujeres en todas las edades como una situación positiva.