MÉXICO, D.F. (apro).- Los análisis genéticos practicados a los 67 cadáveres exhumados de las narcofosas halladas en La Barca, Jalisco, comienzan a dar los primeros resultados. Peritos de la Procuraduría General de la República (PGR) ya lograron identificar a cinco de las víctimas. Se trata de dos militares que realizaban labores de inteligencia contra grupos del crimen organizado que operan en Jalisco y Michoacán, y de tres personas originarias de Sonora. De acuerdo con funcionarios de la dependencia, la mayoría de las víctimas formaban parte de Los Caballeros Templarios, debido a los tatuajes que presentan en sus cuerpos, particularmente la imagen de una cruz que los distingue de otros grupos. Subrayaron que varios de los cadáveres fueron desmembrados, por lo que existe la duda de que detrás de los homicidios esté el Cártel de Jalisco Nueva Generación, que disputa el control de la franja limítrofe con Los Caballeros Templarios. Los funcionarios de la PGR señalaron que a partir del hallazgo de los 67 cadáveres se ha logrado conformar un banco genético con 400 muestras aportadas por personas que buscan a sus familiares entre las víctimas. Las muestras genéticas se tomaron en Michoacán, Nuevo León y Jalisco, donde la institución instaló mesas para ofrecer apoyo a las personas que buscan a familiares desaparecidos desde hace meses o años, puntualizaron. La búsqueda de cadáveres inició el pasado 9 de noviembre, como parte de la indagatoria por la desaparición –seis días antes– de los agentes federales René Rojas Márquez y Gabriel Quijadas Santiago, presuntamente levantados por integrantes del crimen organizado. Los despliegues se instrumentaron entre los municipios de Vista Hermosa, Michoacán, y La Barca, Jalisco, luego de las declaraciones de 20 policías municipales –actualmente bajo arraigo– y tres civiles detenidos en Vista Hermosa, el 7 de noviembre, quienes señalaron que los cuerpos de Rojas Márquez y Quijadas Santiago habrían sido enterrados en la zona. En noviembre pasado, el procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, dijo que los responsables de la desaparición de los agentes eran "prácticamente todos los policías municipales" de Vista Hermosa, pues ellos fueron quienes levantaron a los agentes. "Los detenemos (a los policías municipales) y logramos en la investigación encontrar un lugar (en La Barca) donde pudieran haber sido enterrados los policías", agregó. No obstante, ninguno de los 67 cuerpos localizados en La Barca pertenece a los elementos policiacos desaparecidos.