MÉXICO, D.F. (apro).- Por lo menos 45% de los suelos en el país presentan algún nivel de deterioro, lo que intensifica los procesos de desertificación e incrementa la vulnerabilidad de la población ante eventos hidrometeorológicos extremos, advirtieron académicos de la UNAM y especialistas en la materia. Reunidos en el Simposio para Celebrar el Inicio del Año Internacional del Suelo, organizado por entidades de la UNAM, el Colegio de Postgraduados (Colpos) y el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático ((INECC), los expertos señalaron que se requieren “medidas inmediatas” para replantear el uso y conservación de los suelos. El suelo, destacaron, constituye la base de los ecosistemas terrestres. Es indispensable, añadieron, para mantener la productividad agropecuaria y forestal, la regulación hidrológica, la conservación de la biodiversidad, así como para la adaptación al cambio climático. Por ello consideraron necesario que la conservación de los suelos cuente con una estrategia nacional que permita unificar y direccionar esfuerzos y recursos, y que toda práctica de preservación tenga el soporte científico para su realización y cuente con la debida evaluación de su aplicación. En el acto inaugural del simposio, José Sarukhán, investigador emérito del Instituto de Ecología (IE) y exrector de la UNAM, señaló que el suelo no es sólo el lugar donde uno está parado, sino “un sistema vivo” para el sostenimiento de otros ecosistemas y un componente sine qua non para la vida. “Si no tenemos un sustrato vivo, funcional y operante, cualquier intento de reforestación no se dará; por ello, el Año Internacional de los Suelos debe ser un momento propicio para que esta información salga del ámbito académico”, sugirió. La conmemoración del Año Internacional de los Suelos, que se celebrará durante 2015, estará a cargo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en el marco de la Alianza Mundial por el Suelo y en colaboración con los gobiernos y la Secretaría de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD).