MÉXICO, D.F., (apro).- El primer secretario de Finanzas de la administración de Andrés Manuel López Obrador, y principal protagonista de los “videoescándalos”, Gustavo Ponce Meléndez, fue excarcelado este viernes, luego de permanecer 10 años en prisión, acusado de fraude. El Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal de Primer Circuito concedió a Ponce el amparo–250/2013—que le dio la libertad antes de concluir su sentencia de ocho años y 16 días que le impuso el 13 de abril de 2009 el juez Primero de Distrito en Materia Penal con sede en el Estado de México. El Tribunal explicó que el recurso fue otorgado debido a la “insuficiencia de pruebas". A través de un comunicado, el Consejo de la Judicatura Federal (CJF) refirió que los integrantes del Cuarto Tribunal concluyeron que los elementos de prueba que tomó en consideración la Primera Sala del Tribunal Superior de Justicia del DF sobre el presunto fraude de Ponce, por 31 millones de pesos, eran insuficientes "para demostrar la plena responsabilidad del quejoso". El CJF detalló que el exfuncionario capitalino era acusado de "haber realizado una llamada telefónica a funcionarios subordinados para que dieran prioridad al pago de cuentas por liquidar certificadas de la delegación Gustavo A. Madero, relativas a servicios que no fueron contratados ni recibidos por la mencionada delegación", instrucción que, subrayó, no fue acatada. Los integrantes del Tribunal consideraron que la llamada era insuficiente para que "efectivamente constituyera una aportación necesaria para la comisión del delito". El caso de Ponce Meléndez formó parte de una serie de videos que involucraron a funcionarios de alto nivel de la administración de López Obrador –René Bejarano, Ramón Sosamontes, Carlos Imaz y Gustavo Ponce—quienes se vieron involucrados en presuntos actos de corrupción. Sin embargo, sólo Bejarano y Ponce pisaron la cárcel y de los dos, sólo el segundo permaneció en prisión hasta hoy. El 2 de marzo de 2004 Televisa difundió un video del exsercretario de Finanzas donde se le exhibía apostando en una mesa de juego en el casino Bellagio, en La Vegas Nevada, donde realizaba fuertes apuestas y dejaba propinas de hasta 800 dólares. Ponce Meléndez tenía la cuenta VIP número 02608285 por lo que no le cobraban hospedaje y alimentación, según lo establecido en facturas de sus visitas al Bellagio, a donde acudió 17 veces entre 2002 y 2004. Tras la difusión de la grabación, López Obrador, entonces jefe del gobierno capitalino, ordenó su destitución y la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) le giró una orden de presentación para que compareciera y aclarara el tema de las apuestas y su presunta participación en un fraude por 31 millones de pesos en la delegación Gustavo A. Madero que ya se investigaba. El 8 de marzo la procuraduría capitalina encontró elementos para acusarlo de fraude genérico, enriquecimiento ilícito y peculado, por lo que el juzgado 11 penal del Reclusorio Norte libró orden de aprehensión en su contra. Ponce Meléndez se dio a la fuga y no se supo más de él hasta que en octubre de 2004 fue detenido por elementos de la desaparecida Agencia Federal de Investigación (AFI) en Tepoztlán, Morelos. El 13 de abril de 2009, cuando ya llevaba cinco años en prisión, el juez Primero de Distrito en Materia Penal con sede en el Estado de México lo sentenció a ocho años y 16 días de prisión y a una multa de 661 días de salario mínimo (36 mil 222pesos) por lavado de dinero. Estuvo preso en el penal federal del Altiplano, acusado de lavado de dinero pero el 22 de agosto de 2011 obtuvo anticipadamente su libertad. Ese día terminaba los certificados del servicio médico en el centro penitenciario y alistaba su salida pero al día siguiente, 23 de agosto, la PGJDF cumplimentó una orden de aprehensión en su contra girada por el Juzgado 12 Penal por el delito de fraude genérico y fue reaprehendido. Ingresó entonces al Reclusorio Norte para enfrentar el delito que se le imputaba por una afectación contra la administración capitalina por 31 millones de pesos. El exsecretario de Finanzas capitalino sostuvo que la imputación que se le hizo por fraude genérico era “absolutamente falsa". Finalmente, este viernes obtuvo su libertad, tres años antes de que concluyera su sentencia.