MÉXICO, D.F. (apro).- El “atorón legislativo” en el Senado de la República no pudo destrabarse antes de que terminara este 30 de abril el periodo ordinario de sesiones, por lo que los coordinadores de las bancadas del PRI, PAN y PRD acordaron realizar dos periodos extraordinarios.
En la primera quincena de mayo se discutirá la aprobación de la reforma político-electoral; mientras que en la primera o segunda quincena de junio habrá otro periodo para aprobar las reformas secundarias en materia de telecomunicaciones y energética.
“No nos hemos dejado presionar por ningún grupo fáctico, ni nos vamos a dejar”, sentenció Emilio Gamboa Patrón, en clara referencia a la ley de telecomunicaciones que generó una intensa presión al interior de las bancadas y provocó que el PRI, de última hora, decidiera sacrificar el “predictamen” del senador panista Javier Lozano.
Sobre las marchas y protestas contra la llamada “Ley Peña-Televisa” y en previsión de las movilizaciones contra la reforma energética, Gamboa afirmó que los priistas serán “respetuosos de las manifestaciones, hay libertad de expresión y de tránsito en el país. Espero que sean manifestaciones tranquilas, pacíficas. Están en su derecho”.
El líder de los senadores priistas negó que la reforma energética vaya a “empatarse” con el periodo ordinario que inicia el 1 de septiembre. El compromiso, afirmó, es dictaminar y aprobar en la primera o segunda quincena de junio. Del paquete de 15 leyes que envió este 30 de abril el Ejecutivo federal, seis serán para la Cámara de Diputados por su contenido fiscal y nueve se discutirán en el Senado.
El coordinador de la bancada del PAN, Jorge Luis Preciado, admitió que hubo un “jaloneo natural” al interior de los panistas, respecto a la disputa en curso por la dirigencia partidista entre los simpatizantes de Ernesto Cordero y los de Gustavo Madero. La mayoría de la bancada panista en el Senado apoya a Cordero.
De la reforma política-electoral, consistente en cinco leyes secundarias, hasta el cierre de esta edición se esperaba aprobar solamente la Ley General en Materia de Delitos Electorales, a pesar de que el PRD y el PRI ya habían acordado y negociado la aprobación de tres de las cinco leyes, incluyendo la que sustituirá al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe).
Este miércoles, el PAN se levantó en dos ocasiones de la mesa de negociaciones, intentando obtener, hasta el último momento, mayores candados para que los gobernadores no influyan sobre los procesos estatales y en los institutos electorales estatales.