Pide HRW a la Segob intervenir en caso de asedio a activista en Tamaulipas
MÉXICO, D.F. (apro).- El secretario ejecutivo de Human Rights Watch (HRW), José Miguel Vivanco, pidió al titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, suspender “de inmediato las acciones de hostigamiento e intimidación” emprendidas por oficiales de la Secretaría de Marina contra el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo (CDHNL).
En una carta dirigida a Osorio Chong, Vivanco manifiesta su preocupación por el asedio de marinos contra la organización y su presidente, Raymundo Ramos Vázquez.
“Es absolutamente esencial” que la nueva estrategia de seguridad anunciada recientemente por el presidente Enrique Peña Nieto en Tamaulipas “respete los derechos fundamentales de los ciudadanos del estado, tanto como a los defensores de derechos humanos que los resguardan”, apunta.
En su misiva, el directivo de HRW demanda la intervención del secretario de Gobernación “para garantizar la integridad de una reconocida organización de derechos humanos de Tamaulipas, que ha colaborado estrechamente con Human Rights Watch durante varios años en la documentación de graves violaciones de los derechos humanos”.
El defensor puntualiza en la carta que los “elementos de la Marina allanaron más de 20 casas en el área (en la colonia La Joya de Nuevo Laredo, donde se encuentra la oficina de Ramos Vázquez), supuestamente buscando hombres armados que habrían huido”, y agrega que un oficial pidió a miembros de la organización que lo dejaran “revisar las denuncias y la documentación de la oficina ‘para comprobar que todo estuviera en orden’, a pesar de que no tenían una orden judicial para allanar la oficina ni facultad para investigar”.
Esa organización, apunta, “ha sido un constante refugio y apoyo para víctimas de abusos graves de derechos humanos cometidos por las fuerzas de seguridad, incluyendo desapariciones, ejecuciones extrajudiciales y torturas, perpetrados por la Marina”.
Por separado, Raymundo Ramos dice que los marinos que mantenían rodeada su oficina se retiraron a las nueve de la noche del jueves 15, después de ingresar a unas 25 casas e informar a los habitantes “que estaban buscando a hombres armados”, y revisaron un número no determinado de automóviles. “Sin el permiso de los dueños, los abrían con ganzúas”, sostiene.
En entrevista, señala que pese a ser beneficiario del Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras y Periodistas, dependiente de Gobernación, hasta el momento “no he recibido respuesta de la dependencia, pero llegaron a la colonia dos visitadores de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) que están tomando los testimonios de los vecinos y del personal de nuestra organización”.
A cuatro días de que el presidente Enrique Peña Nieto anunció la nueva estrategia de seguridad para Tamaulipas, Raymundo Ramos considera preocupante que “en los discursos que escuchamos no se citó a los derechos humanos como parte fundamental de la misma”.
Asimismo, precisa que en una visita que hizo Osorio Chong a Nuevo Laredo para abordar el tema de migrantes, “tuve la oportunidad de hablar con él y presentarle un documento en el que exigimos respuesta a las investigaciones de 84 desapariciones, algunas de ellas cometidas por el Ejército y otras por la Marina, aunque también hay indicios de otros más de la participación del crimen organizado”.
Y la incursión de miembros de la Secretaría de Marina en su colonia, “en la que no se registraron decomisos de armas ni hubo detenidos, la interpreto como un mensaje para la organización”.
Remata:
“Estoy convencido de que el CDHNL es un estorbo para la nueva estrategia de seguridad, y lo que vimos fue un mensaje de que nos hagamos a un lado, no quieren que estemos al pendiente de la forma en que llevan a cabo su programa de seguridad, en el que los actores principales son las fuerzas armadas, que aquí en Tamaulipas han causado un sin número de abusos”.