Ponen en entredicho actuación de la CNDH ante violencia obstétrica
OAXACA, Oax. (apro).- El Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE) lamentó la actuación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en los casos de violencia obstétrica.
Según el GIRE, el organismo que dirige Raúl Plascencia sólo emitió cuatro recomendaciones en 122 casos de violencia obstétrica reportados en el periodo de 2009 a 2012.
La violencia obstétrica, dijo, tiene dos modalidades: física, que se expresa en prácticas ‘invasivas’, suministro de medicamentos sin ninguna justificación, así como cuando no se respetan los tiempos o posibilidades para que se lleve a cabo un parto.
Y la psicológica, que implica trato deshumanizado, grosero, o se discrimina e inflingen humillaciones cuando la mujer va a pedir asesoramiento o requiere de atención.
Sin embargo, la ONG advirtió que la manifestación más extrema de la violencia obstétrica se presenta en casos de abuso, como cuando se obtienen autorizaciones para esterilización o para colocación del DIU durante el trabajo de parto, momento en el que la mujer se encuentra más vulnerable.
En ese lapso de cuatro años, ni el IMSS ni la Secretaría de Salud tienen reportes de quejas por malos tratos y/o negligencia médica en el marco de la atención gineco-obstétrica.
En el marco de una reunión convocada por Consorcio para el Diálogo Parlamentario y Equidad se abordó el tema “Omisión e indiferencia ante derechos reproductivos en México”, en la que el GIRE dio a conocer que 38% del total de nacimientos ocurren mediante cesáreas, es decir, más del doble del índice recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que oscila entre 10 o 15%.
También mencionó que, en 2010, siete de cada 10 mexicanas de más de 15 años han tenido al menos un hijo vivo, lo que indica que 71.6% de la población femenina con vida reproductiva ha estado en riesgo de sufrir violencia obstétrica.
Finalmente, los activistas resaltaron que únicamente las leyes de acceso a una vida libre de violencia de Chiapas, Guanajuato, Durango y Veracruz cuentan con definiciones sobre violencia obstétrica.