MÉXICO, D.F. (apro).- De gira de trabajo por la ciudad estadunidense de Los Ángeles, el presidente Enrique Peña Nieto criticó a los estados de ese país que excluyen y discriminan a los migrantes: “Un futuro muy próximo demostrará su error ético, y el tiempo nos habrá de dar la razón”, dijo. Al reunirse con integrantes de la comunidad mexicana que habita en California –uno de los mayores estados en ese país– y a una semana de presentar su segundo informe de gobierno, el priista mexiquense elogió la política del gobernador Edmund Jerry Brown. “Es amiga”, dijo, no como la que realizan otros estados de la Unión Americana “que no han evolucionado” y se alejan de los principios de responsabilidad compartida y de buena vecindad que se procuran México y Estados Unidos. Sin mencionar las causas de la migración desde México –pobreza, desempleo, bajos salarios, marginación, inseguridad, narcotráfico, por mencionar algunas–, el mandatario federal aseguró: “Sabemos que aún hay estados que no han evolucionado tanto como California, que todavía escatiman reconocimiento y peor aún, los derechos de los migrantes. La imposición de medidas discriminatorias que afectan los vínculos entre nuestras comunidades no solamente es éticamente reprobable sino que también se aleja de los principios de responsabilidad compartida y de buena vecindad que se procuran México y Estados Unidos”. En su discurso sentenció: “Estas acciones, lejos de ayudar a sus estados sólo afectan los principios y valores de democracia y respeto a los derechos humanos e igualdad que defendemos en la región de América del Norte. A quienes todavía creen y apuestan por la exclusión, por la discriminación o el rechazo a la diversidad sólo tengo una cosa que decirles: el futuro y un futuro muy próximo demostrará su error ético, el tiempo nos habrá de dar la razón”. Ante la presencia del gobernador de California, Edmund Jerry Brown y 11 gobernadores mexicanos, Peña Nieto se pronunció por una reforma migratoria en Estados Unidos por cuestión de justicia “para quienes tanto aportan a la sociedad de Norteamérica”. Dijo que México quiere ser un factor “de cohesión, no de división”. Se mostró dispuesto para apoyar en la construcción de acuerdos para hacer realidad una reforma migratoria. “Se trata de una cuestión de justicia para quienes tanto aportan al desarrollo de la sociedad norteamericana”. Peña Nieto aseguró que el trabajo de los cónsules mexicanos no distingue entre migrantes legales e ilegales. Por ello, anunció que ordenó a los consulados “instrumentar medidas para apoyar al desarrollo de los migrantes en las comunidades donde viven”. Además adelantó que a partir de noviembre próximo se expedirá una matrícula consular de “alta seguridad”. El Ejecutivo federal afirmó que su gobierno trabaja “para dar calidad de vida a todos los mexicanos”. Pero aún con ese discurso, migrantes que participaron en el encuentro solicitaron a Peña Nieto generar mejores condiciones de seguridad en México para viajar, además de otorgar más presupuesto para becas y programas sociales para sus familias que aún permanecen en el país.