Entronización de Nuño en la SEP, clave en el relevo de Peña en 2018
MÉXICO, D.F. (apro).- “Como ha dicho el presidente de la República, de las 12 reformas estructurales la más importante de todas es la reforma educativa”, dijo Aurelio Nuño Mayer al asumir el control de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
A sus 37 años, con la encomienda de implementar lo que en el gobierno federal han denominado la “segunda etapa” de la repelida reforma, Nuño salió de las oficinas de Los Pinos para ubicarse ante los reflectores como uno de los personajes clave de Enrique Peña Nieto de cara al 2018.
Siendo uno de los asesores más cercanos de Peña desde su gubernatura en el Estado de México, quien hasta esta mañana fungía como jefe de la Oficina de la Presidencia ha protagonizado un vertiginoso ascenso desde que fue coordinador de asesores de Luis Videgaray, en la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la LXI Legislatura.
Egresado de la Universidad Iberoamericana, donde cursó la licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública, y de la Universidad de Oxford, donde tomó la maestría en Estudios Latinoamericanos, el currículum de Nuño pasa por la vicecoordinación de Planeación Estratégica del grupo parlamentario del PRI en el Senado de la República y, entre 2011 y 2012, por la coordinación de las campañas de Eruviel Ávila y de Enrique Peña para la gubernatura del Estado de México y la Presidencia de la República, respectivamente.
Instalado en el primer círculo de poder del gobierno federal, Nuño fue protagonista en la operación del Pacto por México que entregó al gobierno federal la anuencia para implementar todo tipo de reformas.
La presentación del joven peñista ante los trabajadores de la SEP, esta misma tarde, estuvo a cargo de Miguel Ángel Osorio Chong:
“Desde la administración pública probó su eficiencia, su capacidad y su disposición al diálogo. Fue parte del diseño del Pacto por México y, más adelante, al cumplir las estrategias que el presidente directamente le señalaba”, dijo del secretario de Gobernación, en el Salón Nishizawa del edificio de Brasil 31.
Nuño, al igual que Osorio, reconoció la trayectoria del secretario saliente, Emilio Chuayffet. Dijo que lo considera un “maestro” y aplaudió su desempeño en la instrumentación de la reforma que, “sin lugar a dudas, va a transformar el país, a la niñez y a la juventud mexicana”, entre otras exaltaciones.
A los halagos de su sucesor, Chuayffet Chemor correspondió:
“Su calidad, su brillantez y su honradez serán los pilares del renovado prestigio que ha venido adquiriendo esta dependencia”, dijo el exsecretario para despedirse entre más elogios, aplausos y una estela de escándalos.