Inseguridad y violencia en México, reflejo de corrupción y falta de oportunidades: Iglesia
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Arquidiócesis Primada de México aseguró que la inseguridad y la violencia en el país son reflejo de la corrupción, el empobrecimiento, la falta de competitividad y la carencia de oportunidades.
Al hacer referencia a la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción de la Seguridad Pública (ENVIPE) 2016, dada a conocer por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el pasado 27 de septiembre, subrayó que los resultados que se presentaron son preocupantes, aunque hay “quien hace oídos sordos al clamor evidente de la ciudadanía”.
En su editorial del semanario "Desde la fe", publicado este domingo, destaca que de acuerdo con los datos del INEGI, 23.3 millones de mexicanos fueron víctimas de hechos delincuenciales en 2015, y las cifras negras de delitos no denunciados fue de 93.7% a nivel nacional, mientras que en 2014 fue de 92.8%. Los delitos más frecuentes son el robo y asalto en vía pública, extorsión y fraude, recalca.
Según el texto, en determinadas zonas del país la violencia se recrudece y parece incontenible. En esta semana, precisa, Chihuahua sufrió 17 homicidios en menos de 48 horas; Michoacán no parece tener tregua en la guerra contra la delincuencia organizada; Veracruz vio la desaparición y homicidio de dos sacerdotes sin dejar de lado las jornadas sangrientas contra la ciudadanía, y en Guanajuato la inseguridad acabó con la aparente tranquilidad de las comunidades de la entidad.
Tamaulipas tiene más de 4 mil 500 muertos por la violencia en un período de seis años, y Morelos no deja de ser impactado por el crimen y horror de fosas clandestinas.
Detalla que en las últimas tres décadas, tiempo que supone el estancamiento económico del país, más de 40 mil mujeres han muerto bajo circunstancias de demencial y tremenda violencia a nivel nacional, “y lo inaudito es que en los delitos se involucran autoridades policiales”.
En la Ciudad de México, añade, miles de capitalinos “viven el mismo drama que en el resto del país”.
Sostiene que según las autoridades capitalinas, en la Ciudad de México se reporta una perceptible baja en el índice de delitos y no hay “repunte de la violencia”; sin embargo la ciudadanía, gracias a los nuevos instrumentos de denuncia generados por las redes sociales, dice lo contrario.
Todos los días, por lo menos un ciudadano reporta cómo fue despojado de su patrimonio en un asalto grave, a plena luz del día y en hora pico, generalmente por bandas bien estructuradas.
Y la seguridad se convierte en botín cuando las autoridades hacen la política de “no veo, no oigo y no hablo”, subraya.
“Asirse de endebles argumentos afirmando ‘el falso repunte de la violencia’ indica el empecinamiento por fortalecer popularidades ante eventuales candidaturas, aunque la casa esté en llamas y disimulen el agobio de miles de ciudadanos sin tregua de paz que les garantice el regreso seguro a casa y sin amenazas”, concluye.