Anaya aprovecha su momento, aunque sobre el 2018 dice: "No me voy a desconcentrar"
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Político de moda tras conquistar siete gubernaturas y de dejar en el camino a Manlio Fabio Beltrones y Agustín Basave, quienes renunciaron a sus cargos partidarios, Ricardo Anaya, presidente del PAN, se exhibe exultante en su marcha hacia la candidatura presidencial.
Hoy, uno de los principales ideólogos y operadores políticos del sector privado de México, Claudio X. González Laporte, se retrató muy sonriente con Anaya, quien asistió a una reunión de Mexicanos Primero, que preside precisamente el hijo de ese magnate, del mismo nombre, convertido en el principal instigador de la represión contra los maestros que combaten la reforma educativa.
La fotografía que hizo circular Anaya en su cuenta de twitter es elocuente: Sonriente como su contraparte, y en un saludo como suelen darse los niños y adolescentes, choca su puño de la mano derecha con el de González Laporte, asesor y confidente de Carlos Salinas desde que arribó al poder tras el fraude de 1988.
Anaya es aplaudido por los asistentes a la reunión de Mexicanos Primero, en un evento denominado Índice de Cumplimiento de la Responsabilidad Educativa, celebrado en el hotel Hilton del Centro Histórico, quizá porque amaneció con una encuesta devastadora para sus rivales en el PAN: El diario Reforma publicó que la mayoría de los panistas lo prefieren a él como candidato presidencial (44%), en vez de Margarita Zavala (41%) y Rafael Moreno Valle (15%).
Tal ascenso no es fortuito: Obedece no sólo a las gubernaturas que conquistó el domingo 5, una victoria que puso fin a las sucesivas derrotas de 2009, 2012 y 2015, sino a que su imagen está en todas las pantallas de televisión y su voz en todas las estaciones de radio.
El presidente del PAN –a quien sus propagandistas llaman “joven maravilla”-- capitalizó los tiempos oficiales para los partidos políticos y ya rebasó la cifra de un millón 771 mil 884 spots en radio y televisión, que cuadruplicó a los 415 mil 902 del líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador.
Todas las acciones de Anaya tienen una sola dirección: La candidatura presidencial del PAN para 2018, aunque desde el domingo 5, el día de su más reciente gloria, trata de disimular su ambición: “Pensemos en México, ya habrá tiempo de pensar en proyectos personales”.
“No me voy a desconcentrar”
Hoy mismo, tras asistir a la reunión con Claudio X. González Guajardo, expresidente de la Fundación Televisa y que ahora repentinamente le ha dado por decir que combate la corrupción, también negó sus ambiciones.
“Yo no me voy a desconcentrar”, aclaró, porque ahora, según él, está absolutamente concentrado en defender los triunfos del PAN, en preparar la elección del próximo año para las gubernaturas del Estado de México, Coahuila y Nayarit. “Ya vendrá el momento para resolver las candidaturas de 2018”.
En lo que tiene claridad, subrayó, es en tres asuntos: “Primero, el PAN tiene que salir unido, no nos podemos dividir; segundo, se tiene que ir el PRI, le han fallado al país, no pueden seguir gobernando a partir de 2018, y tercero: la alternativa de cambio no puede ser el populismo destructor de López Obrador; el PAN debe ser con los ciudadanos la gran alternativa de cambio”.
Justo sobre la principal gubernatura que se disputará el próximo año, la del Estado de México --que concentra el primer padrón de electores de México--, Anaya expresó que es de vital importancia.
-- ¿Ya convencieron a Josefina Vázquez Mota para ser candidata?
--Estamos apenas dialogando, explorando todas las alternativas, platicando con la dirigencia local. No tenemos aún decisiones tomadas de cara a las elecciones de 2017.
Lo que está pendiente también, expuso, es quién será el sustituto de Basave en la presidencia del PRD para poder abrir también un diálogo de alianza.
Crítico de los legisladores que se opusieron a la total transparencia en la Ley 3de3, Ricardo Anaya solapó a los senadores del PAN, como el coahuilense Luis Fernando Salazar, quienes promovieron una iniciativa para que todos los ciudadanos que reciban recursos públicos deban presentar sus declaraciones patrimonial, fiscal y de intereses, algo que pidió que se corrija.
--¿Pero fue error del PAN también?
--No, yo creo que mucha gente apoyó de buena fe, no hay que confundir el planteamiento que hizo en abril un senador, que después de muchos diálogos él mismo aceptó retirar, justamente por el riesgo de que esa propuesta terminara afectando el Sistema Anticorrupción.
“De tal manera que Luis Fernando actuó de manera responsable cuando decidió retirar su propuesta, la cual jamás fue dictaminada. En cualquier caso, más allá de culpables lo que debe quedar muy claro es que esto es un error, lastima al Sistema Nacional Anticorrupción y, por lo tanto, se debe corregir”.
--¿Habría alguna sanción para los cuatro senadores que no votaron?
--He hablado personalmente con Fernando Herrera, nuestro coordinador, me ha explicado los motivos por lo que no asistieron, no tengo ningún indicio para suponer mala fe en su ausencia.
Respalda reforma educativa
Sobre la violencia en Oaxaca, donde el domingo murieron ocho personas tras la acción de las policías Federal y Estatal, Anaya lamentó los fallecimientos y reiteró su respaldo a la reforma educativa: “El diálogo no tiene que estar peleado con la aplicación de la ley”.
Y ante la negativa del secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong de renunciar por los hechos de violencia, aclaró:
“Lo que creo es que hay que lamentar estos hechos de violencia, entender que la reforma educativa debe ir hacia adelante porque es buena para los niños y para los jóvenes, pero que se debe aplicar en el marco del respeto de los derechos humanos y que debe haber más diálogo en el marco de la propia ley”.
--¿Se debe aclarar lo que ocurrió?
--Sí, por supuesto, la exigencia es que se aclare lo que sucedió; se deben deslindar responsabilidades y el gobierno tiene un reto muy importante, deben hacer una investigación muy transparente desde el inicio, aprender de la experiencia de Ayotzinapa, si hay contradicciones en esta investigación al final nadie les va a creer. Lo que todos merecemos es conocer la verdad.