CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La fortuna establecida en los centros offshore del mundo alcanzó 9.8 billones de dólares en 2015 –un incremento de 3% comparado con el año anterior--, de los que 1.2 billones provienen de América Latina, reveló hoy el gabinete de consultoría Boston Consulting Group (BCG) en su informe anual sobre la riqueza mundial. De acuerdo con el despacho, 65% del dinero ubicado en el sistema offshore proviene del “nuevo mundo”; es decir, las economías emergentes, y en particular el subcontinente latinoamericano y del Medio Oriente. “En estas regiones, las tensiones políticas y económicas (así como el acceso a productos financieros no disponibles onshore) siguieron alimentando el flujo de riquezas offshore, a medida que los inversionistas buscan activamente los lugares más atractivos para domiciliar sus bienes”, aseveró el BCG. Según el BCG, la mayor parte del dinero en el mundo offshore se encuentra en Suiza, Panamá, Islas Británicas, Singapur, Hong Kong o Estados Unidos. En abril pasado, a raíz de la difusión de la investigación global #PanamaPapers --en la que participó Proceso--, el mundo offshore se convirtió en el centro de la atención y de la crítica internacional, ya que más de 109 medios de comunicación en el mundo revelaron los métodos y clientes millonarios del despacho panameño Mossack Fonseca, especializado en la incorporación de empresas fantasmas en paraísos bancarios. El informe también destacó que el año 2015 favoreció otra vez a los millonarios. Su fortuna se incrementó en 7%, por lo que los más ricos del planeta poseen ahora 47% de los activos financieros globales, cuyo valor se elevó a 168 billones de dólares en 2015. En América Latina, la riqueza privada se incrementó en 7% entre 2014 y 2015, hasta alcanzar 5 billones de dólares. Según las estimaciones del BCG, en América Latina “la riqueza detentada por los Individuos de Fortunas Netas Ultra Elevadas (de más de 100 millones de dólares), así como de las Altas y Medias Fortunas Netas crecerá entre 9 y 11% anual hasta 2020”.