'PRI será cómplice si evita desafuero de diputado cercano a Javier Duarte”: Zambrano

domingo, 23 de abril de 2017 · 13:49
CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- El juicio de procedencia contra el diputado federal con licencia Antonio Tarek Abdalá esta semana, probará los dichos de su partido, el PRI, en el sentido de estar a favor de combatir la corrupción y la impunidad o si es cómplice, dijo Jesús Zambrano Grijalva, vicecoordinador del grupo parlamentario del PRD en la Cámara de Diputados. El legislador perredista expuso que el PRI no impedirá entonces que –a más tardar el jueves– se retire el fuero al extesorero de Javier Duarte, para ser sujeto a proceso por las acusaciones que se le imputan en el sentido de haber desviado miles de millones de pesos correspondientes a las áreas de educación, salud y el campo, en perjuicio los veracruzanos. “Pareciera que estamos viviendo en el país del nunca jamás, en el que nunca pasará nada que trastoque la situación de impunidad, de corrupción en el que México ha estado inmerso durante décadas. Se ha hablado de que la esposa y los hijos del exgobernador veracruzano Javier Duarte –detenido y encarcelado en Guatemala– salieron rumbo a Londres y la Procuraduría General de la República cruzada de brazos. Esto ahonda las sospechas de que entonces la captura en Guatemala fue pactada, ojalá no sea así”, advirtió. En los próximos días, agregó el legislador federal, habrán de resolverse varios juicios de desafuero instalados en la Cámara de Diputados, entre ellos el de Tarek Abdalá, asunto –dijo– al que se le ha estado dando largas. Si el PRI se empecina en defenderlo y evita el desafuero del diputado con licencia cercano a Duarte, entonces será cómplice y demostrará en los hechos que no está dispuesto a combatir la corrupción y la impunidad. En manos del PRI está –remató el perredista– el que empecemos a abrir un nuevo capítulo en un México diferente, con más juicios de procedencia contra funcionarios públicos que siguen ahí, durmiendo el sueño no de los “justos” sino de los “injustos”. La sociedad mexicana quiere otra cosa, concluyó.

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