CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El jefe de gobierno Miguel Ángel Mancera llamó a abogados, jueces y magistrados a “cerrar filas” en favor de la propuesta de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), que él mismo preside, para impulsar en el Congreso de la Unión ajustes al Nuevo Sistema Penal Acusatorio. “De ninguna manera estamos hablando de ir hacia atrás como se quiere posicionar por algunos. De ninguna manera estamos hablando de sepultar el procedimiento penal. Estamos hablando de perfeccionarlo, de mejorarlo”, dijo en su discurso por la celebración del Día del Abogado en el Pepsi Center WTC. Insistió: “Hoy es importante este cierre de filas, que llevemos al terreno de los hechos, muchas de las ventajas y de las aplicaciones. A nosotros nos han dado la posibilidad de conocer el Derecho, de estudiarlo, de analizarlo y de poder crear leyes en muchos de los casos, utilicemos ese talento”. Ante el alza de delitos en la Ciudad de México, el exprocurador capitalino ha argumentado que, por fallas en el nuevo sistema penal, los delincuentes atrapados por la Policía quedan en libertad y siguen cometiendo delitos. Incluso, la semana pasada llamó a la sociedad a “estar preparada” para la posible salida a las calles de unos cuatro mil reos de las cárceles capitalinas. Este miércoles, Mancera Espinosa llamó también a la academia e instituciones relacionadas con la justicia, a aportar sus comentarios, propuestas y conocimientos para mejorar el nuevo sistema penal acusatorio. Según su visión, primero se necesita analizar los delitos considerados graves para dar pronta respuesta de justicia a los ciudadanos, además de ampliar el catálogo de los delitos que merecen prisión preventiva. El funcionario también pidió “a las autoridades federales” que “a la brevedad podamos contar con los brazaletes (electrónicos) que esta es una necesidad urgente”. La intención, detalló, es que éstos sean usados como medida cautelar, monitoreo y vigilancia a las personas preliberadas de la cárcel. La propuesta de ajustes al nuevo sistema, explicó, es “hacer notar a la ciudadanía que existe preocupación por la seguridad de sus familias, ya que nadie está exento de sufrir un delito, puesto que hoy están abiertos los incentivos negativos”. Y puso un ejemplo: “Escuchaba ayer al comisionado de la Policía Federal, ¿cómo es posible que detengan a alguien con una Barret o con un lanzagranadas y se considere que no es un delito grave?”. El aspirante presidencial aclaró que “la Ciudad de México no se va a quedar callada, vamos a seguir hablando y vamos a buscar cómo perfeccionar esta tarea de protección a nuestra gente, es una obligación que tenemos, no le podemos dar la espalda a la gente”. Durante la celebración, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJ-CDMX), Álvaro Augusto Pérez Juárez, coincidió con el mandatario local: “El nuevo sistema que se ha implementado, ya se ha dicho, es un sistema en implantación, pero que requiere ajustes, porque la sociedad así lo reclama y la sociedad no se equivoca”, aseguró.