El Congreso rememora el 68 con izamiento de la bandera a media asta en el Zócalo

martes, 2 de octubre de 2018 · 15:19
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Martí Batres, y la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna, ambos de Morena, encabezaron el acto de izamiento de la bandera nacional a media asta en la Plaza de la Constitución, en señal de luto por las personas que perdieron la vida en la matanza del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco. Batres destacó que, por primera vez, se realiza una ceremonia republicana, con la participación de los tres Poderes de la Unión, a fin de reconocer los hechos del 2 de octubre para que éstos “no vuelvan a repetirse”. En el acto participaron también el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, en representación del Ejecutivo federal; y el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis María Aguilar Morales, así como legisladores de las distintas fuerzas políticas. En declaraciones a la prensa, Batres afirmó que a raíz de los sucesos de 1968 se desarrollaron muchos procesos políticos importantes que han permitido la democratización del país. “Cincuenta años después también hay un cambio político en el país y que tiene que ver con estos acontecimientos”, afirmó. “Con los resultados del 1 de julio de 2018 se cierra un ciclo abierto el 2 de octubre de 1968”, reflexionó. “Que no se repita”: Beatriz Paredes En la tribuna del Senado, a nombre de la bancada del PRI, Beatriz Paredes afirmó que esta conmemoración “exige que no se repita, que nunca se repitan respuestas represivas ante la movilización social; que la opción del Estado no sea el autoritarismo”. “Ningún tipo de autoritarismo admitimos en nuestra nación, ni de centro, ni de izquierda o de derecha”, sentenció la exdirigente nacional del PRI.  “Por eso, estamos en un Senado en donde todos votamos que se estableciera en nuestro recinto ‘Movimiento Estudiantil de 1968’”, afirmó. Por su parte, la senadora Kenia López Rabadán, del PAN, recordó que su partido “sí se pronunció en contra de la represión, lo que no hicieron otros partidos políticos”, en octubre de 1968. Recordó que los dirigentes nacionales del blanquiazul, Adolfo Christlieb Ibarrola e Ignacio Limón Maurer, condenaron la represión. “El movimiento estudiantil de 1968 fue, en buena medida, el parteaguas democrático de nuestro país. Algunas voces críticas de aquel momento no sucumbieron ante la estridencia del aparato oficial de comunicación; se utilizaron no sólo las plazas públicas, sino los cafés, los pasillos de oficina y las charlas entre amigos o familiares para señalar reiteradamente los errores, los excesos y las inconsistencias de un régimen que permanecía inerte”, recordó la legisladora.

Comentarios