CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) anunció que colaborará con los abogados de Erick Uriel Sandoval Rodríguez hasta lograr la reparación del daño, luego de que por una fallida investigación de la Procuraduría General de la República (PGR) permaneció recluido en el Cefereso de Gómez Palacio, Durango, durante 224 días. A una semana de que el profesor de educación física fuera puesto en libertad, la CNDH anunció que colaborará con los abogados defensores de Sandoval a quien “autoridades erróneamente identificaron como ‘La Rana’ o ‘El Güereque’, real partícipe de los hechos de Iguala”. En un comunicado, el organismo consideró que la reparación integral del daño al profesor, a quien también apodan “La Rana”, deberá “traducirse en medidas de restitución, rehabilitación, compensación y satisfacción como atención psicológica a él y sus familiares; compensación económica en lo conducente y disculpa pública de la PGR, de acuerdo con lo dispuesto por la Ley General de Víctimas, y su inscripción en el Registro nacional de Víctimas”. Destacó que acompañará la estrategia jurídica que iniciaron los abogados de Sandoval Rodríguez contra la PGR, que “pese a las pruebas de inocencia del agraviado, mantuvo su acusación, mientras que el probable partícipe de los hechos está en libertad y con total impunidad”. El organismo reiteró que la detención de Erick Uriel “fue equivocada y que, por tanto, fue privado injustamente de su libertad, por lo cual brindará el acompañamiento correspondiente en el proceso para que se reconozca esta postura”. La CNDH recordó que, tras ser acusado por delincuencia organizada y secuestro, en agravio de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Sandoval Rodríguez fue puesto en libertad “bajo las reservas de ley”, por las irregularidades “que afectaron el debido proceso”. Abundó que “las resoluciones judiciales se basaron en la desvaloración judicial de las pruebas que implican en los hechos al individuo identificado por sus cómplices como ‘Edgar’ (a) ‘La Rana’ o ‘El Güereque’, real partícipe de los eventos criminales, no sobre el hecho demostrado fehacientemente por la CNDH relacionado con la identidad de Érick Uriel Sandoval -jamás reconocido por la PGR- de que no era él a quien los presuntos ejecutores de los abominables hechos de Iguala se referían en sus declaraciones”. De esa manera, “la resolución no se basó en la identidad de Erick Uriel Sandoval, inocente de los hechos, sino en pruebas desvaloradas que sólo favorecen al verdadero presunto partícipe de los hechos”.