CIUDAD DE MÉXICO (apro).— La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) consideró viable que el salario mínimo llegue a los 102 pesos diarios, que es la cifra estimada para alcanzar la línea de bienestar establecida por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval). En rueda de prensa celebrada en el auditorio del Club de Industriales, el presidente del organismo empresarial, Gustavo de Hoyos Walther, aseguró que “este aumento ya hemos visto que no genera efecto faro, no provoca aumento de inflación, tampoco informalidad, ni desaceleración en el empleo”. Sin embargo, el Banco de México (Banxico) ha señalado en sus recientes comunicados de política monetaria que un eventual aumento en los salarios podría presionar la economía, como en el publicado el pasado 15 de noviembre: “Se podrían generar presiones en la economía en la medida en que las negociaciones salariales no sean congruentes con las ganancias en productividad”, acotó el Banxico. De acuerdo con el líder patronal, en la reunión de la primera quincena de diciembre en la que sesiona la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) se planteará elevar el salario mínimo general desde los 88.36 pesos en los que ahora se ubica a los 102 pesos, el cual se espera que entre en vigor el primer día de enero. De hecho, aseguró que la Coparmex y la futura secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde, existe “plena coincidencia” con respecto a la propuesta del aumento salarial. Por otra parte, para la Coparmex es necesaria la permanencia de la Conasami, pero refundada y con otro nombre. “Que no desaparezca la Conasami, se requiere que exista una comisión tripartita. Tiene que haber una refundación, incluido un cambio de nombre, y una ampliación de su mandato para que este órgano del Estado de mexicano tenga a su cargo la administración de la política de remuneraciones en el país, y que uno de sus productos sea la fijación del salario mínimo”, acotó Gustavo de Hoyos. Asimismo, el líder de la Coparmex manifestó que es preferible mantener una sola zona económica en el país en materia salarial, ante la propuesta del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, sobre aumentar al doble el salario mínimo en la frontera a 176.72 pesos, lo cual “podría generar migración interna de los estados colindantes”. “No es que sea malo o imposible el aumento del salario mínimo en esa zona al doble, de hecho hoy nadie trabaja ahí por dos salarios mínimos. El monto no preocupa, sino abandonar el camino de uniformidad salarial en el que hemos avanzado. Mejor sería que ese aumento fuera un objetivo nacional y no solo en la frontera”, explicó.