En nuevo intento por salir del sótano, Meade se aferra ahora a insignias priistas y llama a militantes a luchar 'hasta la muerte”
CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- Calificado por el nuevo dirigente del PRI, René Juárez Cisneros, como el relanzamiento de la campaña de José Antonio Meade, el candidato de la alianza Todos por México llamó a los militantes priistas a luchar “hasta la muerte” para conseguir la victoria el primero de julio.
Aunque se anunció que sería un evento de más de 10 mil militantes, el llamado se quedó corto, pues apenas una tercera parte del estacionamiento de la sede nacional priista fue ocupada.
José Antonio Meade llegó con una chamarra roja del PRI, la primera vez que la usa en toda la campaña. También estrenó nuevos promocionales con el título “Presidente” y un escenario donde, también por primera vez, apareció el logo del PRI en medio de la pared con los colores de la bandera.
Entre aplausos, tamborazos y porras, Meade convocó a los priistas a luchar por la patria.
“Hoy la patria nos convoca de nuevo, está en juego nuestro futuro. Esta no es una elección cualquiera, esta es una elección importante, esta es una elección frente a la cual nuestros hijos nos van a preguntar de qué lado estuvimos. Nuestros hijos nos van a preguntar, habiendo tenido la oportunidad de estar en la arena, qué estuvimos dispuestos a hacer”.
Casi a gritos Meade insistió:
“Queremos que se nos ubique del lado correcto de la historia, del lado que le apostó a la estabilidad, del lado que le apostó a transformar a México, del lado que le apostó a la seguridad. Pero, sobre todo, del lado que estuvo dispuesto a jugársela a muerte para defender lo que creemos en este país”.
Ante su padre Dionisio Meade y su esposa Juana Cuevas, los líderes de las cámaras legislativas, los gobernadores priistas, los candidatos a gobernador, diputados y senadores, así como de los sectores del partido, Meade repitió en innumerables ocasiones que ganará esta elección “por el bien de la patria”.
“Quiero que recordemos este 6 de mayo como el día en donde en nuestro corazón se albergó la certeza de que vamos a ganar”, comenzó su discurso Meade con voz alta.
“Salgamos de aquí convencidos del triunfo, salgamos de aquí listos para dar una batalla y ganar esta elección”, exhortó a los priistas de la dirigencia, los sectores y de la base del partido a quienes hizo un reconocimiento.
Meade dijo estar convencido de que sólo cuando se trabaja en unidad y con la seguridad de que “son los mejores”, se ganan las elecciones como en Coahuila y el Estado de México.
El exsecretario de Hacienda lanzó con bríos el grito de “¡vamos a ganar!”, pidiendo a los asistentes motivación para triunfar en la elección presidencial y los demás cargos en juego: ocho gubernaturas y la Ciudad de México, así como diputaciones y senadurías.
“No hay, para ganar, mejor motivación; no hay, para ganar, mejor instrumento que estar convencidos de que somos los mejores y de que sólo con nuestro triunfo el país, nuestros estados, nuestros municipios, nuestras comunidades, tendrán un rumbo cierto y seguro. Cuando en el priismo sabemos que está en juego el futuro de la nación, salimos a dar la batalla”.
Meade hizo un reconocimiento al PRI al asegurar que ese partido es un activo que le ha dado estabilidad y gobernabilidad al país. Por eso solicitó a los militantes que cuando salgan a la calle a pedir el voto, defiendan la democracia.
“En esta campaña decimos ‘no’ a visiones autoritarias, esta elección no es una elección que enfrentemos con la nostalgia de un legado, esta es una elección en donde lo que está en juego es el futuro del país”, reiteró el abanderado de Todos por México.
Auguró que en estos 56 días que quedan de la campaña, se va a demostrar de qué está hecho el PRI:
“En estos 56 días, vamos a ver a una dirigencia que está concentrada en dar rumbo al esfuerzo de todos”, sostuvo entre gritos de “¡Sí se puede!”.
Meade manifestó confianza en lo que llamó “ejército de millones de militantes y simpatizantes” que –afirmó– saldrán a la calle, que tocarán puerta por puerta, todas las manzanas, todas las colonias, todas las secciones de todos los distritos, de todas las circunscripciones.
Advirtió que ante “quienes dicen con soberbia que el PRI ya se va; a los que con soberbia dicen que el PRI ya se va, les decimos que sí, que nos vamos de esta explanada, ¡a Los Pinos!”.
En este relanzamiento, Meade prometió que de ganar será un presidente honesto y unido al PRI.
René Juárez Cisneros dio la bienvenida a Meade asegurando que trabajarán en unidad hasta conseguir la victoria.
“No hay espacio para el cansancio ni para el pesimismo, vamos a trabajar porque es ahora o nunca. Que se escuche bien, ahora o nunca”, exclamó el guerrerense.
El nuevo dirigente nacional del PRI llamó a los militares no perder el tiempo en confrontaciones estériles, ni engancharse en discusiones inútiles, sino dedicar todo el tiempo a trabajar para ganar:
“No perdamos el tiempo cuando el adversario nos quiere distraer, hay que utilizarlo hablando bien de los nuestros, hablando de la confianza que inspira nuestro candidato, de sus ideas, de sus compromisos, hablemos del hombre que garantiza certidumbre, certeza y rumbo cierto en la conducción de la patria, que de eso no tenga duda nadie”, sostuvo el líder priista ante los gritos y porras de los asistentes.
Sin embargo, René Juárez le dedicó un tiempo a criticar a los adversarios de Meade.
“Señor candidato y amigo, usted es el candidato de las soluciones, no de las confrontaciones; el candidato de la congruencia, no del oportunismo; el candidato de la experiencia, no de las ocurrencias; el candidato de la seguridad, la prosperidad y de la honestidad. Es usted el candidato que México necesita, que no le quede duda a nadie”.