'No seré como Fox, que traicionó la promesa del cambio”, se compromete López Obrador en Guanajuato
GUANAJUATO, Gto. (apro).- Frente al edificio de la Alhóndiga de Granaditas, en el último acto de la gira que efectuó por dos días en el estado, Andrés Manuel López Obrador aseguró a los guanajuatenses que, a diferencia de la fallida alternancia en el 2000 con el triunfo de Vicente Fox, de ganar él la Presidencia no traicionará a los mexicanos y cumplirá todos los compromisos asumidos.
En una explanada que los seguidores y militantes de la coalición Juntos Haremos Historia no lograron llenar, a pleno sol, López Obrador recordó la transición representada en el 2000 por Fox Quesada, quien se convirtió en el primer presidente de la alternancia que rompió la permanencia del PRI en Los Pinos:
“En el 2000 la gente, no sólo de Guanajuato, de todo el país, se entusiasmó porque Fox como candidato a la Presidencia habló de que iba a haber un cambio, y mucha gente lo apoyó de buena fe y ya conocemos el resultado, se convirtió en un traidor”, señaló el tabasqueño.
En esta parte de su discurso -.que se extendió por más de media hora--, el candidato de Morena, PES y PT dijo creer que la traición de Fox a las expectativas despertadas en el país por la alternancia “vino de que no tiene ideales ni principios, ni le tiene amor al pueblo” y es un hombre dominado por la ambición como todos los políticos tradicionales, los que buscan el poder por el poder.
En términos similares se refirió al sucesor de Fox, Felipe Calderón, “enano acomplejado y corrupto que le dejó el avión comprado a (Enrique) Peña”.
“Yo no voy a traicionarles, no voy a dejar de lado mis ideales, mis principios. No les voy a decepcionar ni a fallar”, reiteró.
Unos minutos antes, el candidato de Morena a la presidencia municipal de Guanajuato, Roberto Loya Hernández, habló ante López Obrador y le pidió destinar a programas y apoyos para Guanajuato el dinero de la pensión que le retirará al expresidente Vicente Fox, como lo ha expresado en tantas ocasiones.
“Vamos a buscar la manera de que ese dinero regrese, todo lo que se ahorre se va a apoyar a los productores de Guanajuato”, respondió el tabasqueño en su intervención.
Luego hizo un paréntesis en su discurso para ofrecer sus condolencias a los familiares de los seis agentes de la Policía Vial ejecutados en una calle del centro de Salamanca, justo cuando él se encontraba de visita en Valle de Santiago, municipio ubicado a unos cuantos minutos de aquél.
En tanto, el candidato a gobernador, Ricardo Sheffield Padilla, afirmó que en Guanajuato la corrupción la encabeza el gobernador panista Miguel Márquez, a quien acusó de opacidad en el uso de los recursos públicos en temas como la compra de los terrenos para la instalación de la planta de Toyota, así como la concesión entregada al Grupo México de Germán Larrea para la construcción de un libramiento en Silao.
Apenas un día antes, en su visita a Uriangato, López Obrador había vuelto a hablar sobre Larrea, un hombre que “antes de Carlos Salinas de Gortari ni siquiera figuraba en las listas de los hombres más ricos del mundo, pero llegó Salinas y le entregó la mina de Cananea al 20% de su valor”.
El candidato presidencial puntero en las encuestas se refirió a la asignación de la concesión decretada por el panista Márquez Márquez para la empresa filial del Grupo México, de manera directa y por un plazo de 30 años; “este gobernador le dio esta carretera para que la cobre, ese es el problema, la corrupción”.
Y este viernes 1 en la Alhóndiga, López Obrador insistió su oferta principal:
“Se van a notar los cambios desde el principio; no voy a permitir la corrupción de nadie, ni de mis compañeros que llevan ya muchos años conmigo ni de mis familiares. No vamos a permitir que se roben el dinero del pueblo, vamos a castigar a quienes incumplan; no habrá influyentismo, ni nepotismo, ninguna de estas lacras de la política”.