CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación al director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Germán Martínez Cázares, por el fallecimiento de una mujer de 51 años, derivado de un diagnóstico erróneo de médicos del Hospital General de Zona 57 en “La Quebrada”, Estado de México. El documento recomendatorio 6/2019 instruye a Martínez Cázares a reparar integralmente el daño a la familia de la mujer, que fue diagnosticada con “bronquitis aguda y dolor torácico”, cuando en realidad estaba sufriendo un “infarto agudo al miocardio”, situación registrada en junio de 2015. De acuerdo con la investigación del organismo, “tres personas servidoras públicas violentaron los derechos humanos a la protección de la salud que derivó en la pérdida de la vida de una persona de 51 años de edad, así como al acceso a la información en materia de salud, por la indebida integración del expediente clínico”, documento que tenía fallas, como la falta de notas médicas y datos incompletos. El caso se presentó en el Hospital General 57 “La Quebrada”, cuando la víctima ingresó al servicio de urgencias a las 17:10 del 10 de junio de 2015. La mujer tenía “antecedentes de hipertensión arterial sistémica en tratamiento de 15 años de evolución, tabaquismo desde los 20 años de edad”, y al momento de ser atendida por el médico de guardia reportaba “dolor intenso en el pecho, tos excesiva, pérdida de fuerza en el brazo, piernas hinchadas, dolor de cabeza, distensión y dolor abdominal, por lo que se le diagnosticó ‘bronquitis aguda’”. Diez minutos después un segundo médico le diagnosticó dolor torácico, toda vez que la víctima le reportó molestias desde la madrugada de ese 10 de junio, y a las 17:20 el mismo servidor público diagnosticó hipertensión arterial sistémica, “probable cardiopatía hipertensiva, probable SICA (síndrome coronario agudo/angina) inestable”, ante las molestias en el tórax, la ansiedad y dificultad para respirar de la paciente. La mañana del 11 de junio la víctima fue dada de alta por un tercer médico, pese a que los estudios de laboratorio advertían “la presencia de hiperglucemia” (elevación de la glucosa). Ante la persistencia de los síntomas, el hijo de la mujer, identificado como V2, acudió a un médico particular, quien a partir de un electrocardiograma “confirmó que cursaba con un infarto cardiaco”, por lo que llevó a su madre al Centro Médico Nacional “La Raza”, donde falleció a las 00:20 horas del 12 de junio. El 2 de julio de 2015, el hijo de la víctima presentó su escrito de queja ante la CNDH. Del análisis del expediente, el personal médico de la CNDH determinó que los servidores públicos del IMSS no atendieron adecuadamente a la mujer de 51 años, identificada en la recomendación como V1, “ya que debieron considerar su estado integral”. Debido que no se le aplicó “un protocolo de estudios completo” se ocasionó un “diagnóstico erróneo y el suministro de un tratamiento inadecuado, por lo que el padecimiento evolucionó de manera tórpida hacia su deceso”, consideraron los peritos del organismo. Ante los agravios corroborados, el organismo recomendó que, en coordinación con la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), se repare el daño “integralmente a su hijo y demás familiares conforme a derecho corresponda”. La reparación deberá incluir una compensación, “atención psicológica y tanatológica, así como se les inscriba en el Registro Nacional de Víctimas”. La CNDH pidió al director del IMSS su colaboración en la queja que el organismo presente ante el Órgano Interno de Control del Instituto, y en la denuncia que se presente ante el Ministerio Público de la Federación contra el personal médico que incurrió en las violaciones a derechos humanos, y que se anexe en sus expedientes laborales una copia de la recomendación 6/2019. El organismo pidió al director del IMSS que se tomen medidas efectivas de prevención, “para garantizar que los expedientes clínicos que se generen con motivo de la atención médica se encuentren debidamente integrados conforme a las legislaciones nacional e internacional, Normas Oficiales Mexicanas, así como las Guías de Práctica Clínica”, indicadas en la misma recomendación. La CNDH sugirió capacitar al personal médico del hospital involucrado, en “materia de derechos humanos, conocimiento, manejo y observancia de las NOM”, así como que se emita una circular al personal médico para que se someta a la “certificación y recertificación ante los Consejos de Especialidades Médicas para brindar un servicio médico adecuado y profesional, y atender este tipo de asuntos con diligencia”. El organismo también pidió a Martínez Cázares designar a una persona servidora pública “de alto nivel” que sea enlace con la CNDH para dar seguimiento a la recomendación.