CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró hoy que no responderá a su homólogo estadunidense, Donald Trump, respecto a la situación migratoria, pues dijo, toma en serio las advertencias y prefiere ser prudente. En su conferencia de prensa matutina, el mandatario mexicano dijo que prefiere “no adelantar vísperas” por un eventual cierre de la frontera. “… Decirles que estamos hablando, no vamos a confrontarnos con el gobierno de Estados Unidos”, dijo. El mandatario divagó en torno al llamado que hizo ayer en Poza Rica para que los asistentes le dijeran si debía o no contestarle a Donald Trump y justificó su falta de respuesta afirmando: “ya me lo recomendaron mis asesores internacionalistas de Poza Rica”. La advertencia de Donald Trump, lanzada el pasado sábado, implica el recorte de las ayudas económicas a El Salvador, Honduras y Guatemala, países a los que acusa de enviar caravanas migrantes de manera deliberada. Ante ello, anunció que cerrará la frontera o grandes secciones de ésta, si el gobierno mexicano no frene el flujo migratorio, en el contexto de la llamada “caravana madre”. Mientras la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, atizó un diferendo diplomático con Honduras que rechazó las imputaciones estadunidenses, así como mexicanas, en relación a las declaraciones de la funcionaria que el pasado viernes dijo que se alista una caravana de 20 mil personas, llamada la “Caravana Madre”. En su conferencia de prensa matutina, López Obrador fue reiterativo en su plan de fomentar la cooperación para el desarrollo, recordó que son los países centroamericanos los principales expulsores de flujos migratorios, pues aseguró que sólo es entre 10% y 15% el cruce de ciudadanos mexicanos hacia Estados Unidos, del ingreso migratorio total del país del norte: “digo, nada más para ubicarnos”. El presidente de México se mostró esperanzado en que la expulsión de mexicanos se detenga, en tanto, insistió en no desear caer en una dinámica de confrontaciones. “Por nuestro territorio pasan migrantes centroamericanos y tenemos que ordenar esa migración y (conseguir) que se protejan sus derechos humanos pero serenos, tranquilos, sin aspavientos, con mucha prudencia y responsabilidad”.