CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Cuatro implicados en los granadazos lanzados la noche del 15 de septiembre de 2008 en la plaza principal de Morelia recibieron amparo para no ser reaprehendidos y queden sin efecto las recompensas que se ofrecían por su captura, informó el semanario Zeta de Tijuana. La protección constitucional, originalmente otorgada por el Primer Tribunal Unitario del Tercer Circuito, fue confirmada en recurso de revisión por parte del Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal con residencia en Guadalajara, en favor de los imputados Juan Carlos N. “El Grande”, Alfredo N. “El Valiente”, Julio César N. “El Tierra Caliente”, y Jorge Eduardo N, destaca la nota publicada en la página web de Zeta. Estas personas habían sido señaladas por las autoridades federales como presuntos responsables en la comisión de los delitos de homicidio agravado, lesiones calificadas y portación de granadas, cometidos en la Plaza Melchor Ocampo, y en la esquina de las calles Madero Poniente y Quintana Roo, en Morelia, cuando se conmemoraba el Grito de Independencia. Sin embargo, recuerda Zeta, en sentencia dictada por el Juzgado Sexto de Distrito de Procesos Penales Federales en el Estado de Jalisco, en la causa penal 254/2008, en mayo de 2015, los cuatro imputados fueron absueltos al haberse probado actos de tortura en su contra por parte de los aprehensores y otras violaciones procedimentales. En diciembre de ese año, la entonces Procuraduría General de la República ofreció una recompensa hasta por 1.5 millones de pesos para su recaptura. Por ese motivo, los presuntos implicados solicitaron el amparo del Primer Tribunal Unitario, mismo que se resolvió en su favor el 14 de diciembre de 2018. Inconforme con el fallo, la hoy Fiscalía General de la República interpuso el recurso de revisión, el que apenas fue resuelto hace unas horas y determinó confirmar el amparo y protección en favor de los quejosos. El amparo también ordena que la FGR deje sin efectos el acuerdo por el que se ofreció la recompensa para reaprehender a los hoy liberados, quienes en esa condición deberán esperar su futuro legal. Los atentados en Morelia provocaron la muerte de ocho personas y lesiones a otras 108.