CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) exhortó al gobierno del presidente López Obrador a hacer un alto en el camino y reconsiderar los riesgos que implica que Petróleos Mexicanos (Pemex) asuma la construcción de la nueva refinería de Dos Bocas, bajo la supervisión de la Secretaría de Energía (Sener). Según el organismo que dirige Gustavo de Hoyos, dicha decisión podría acarrear graves consecuencias a Pemex, a las finanzas públicas y al país en general. En primer lugar, justificó, la empresa petrolera es la más endeudada del mundo y aun así emprenderá por su cuenta un proyecto de la magnitud de la refinería “en una línea de negocio en la que ha sido históricamente poco rentable”. En segundo, que el hecho de que las empresas internacionales especializadas en la materia hayan decidido no participar bajo las condiciones propuestas después de estimar que el costo de la obra y el plazo superaba las estimaciones hechas por el gobierno. En tercero, el riesgo que conlleva “asumirse como un eficiente desarrollador de infraestructura cuando es de dominio público su poca o nula experiencia en la materia”; en cuarto, el ir en contra de la tendencia mundial de sustituir los combustibles fósiles por otros más amigables con el medio ambiente. Y en quinto, que estudios serios como el presentado por el Instituto Mexicano para la Competitividad estima en 2%l as probabilidades de éxito para el proyecto. Por todo ello, la Coparmex, dijo que las cosas le pueden salir mal al gobierno.