CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Tras el intento de salida de un grupo de migrantes hacinados en el espacio “Recinto Ferial Mesoamericano” de Tapachula, el Instituto Nacional de Migración (INM) sostuvo que “las personas extranjeras albergadas han contado con todos los servicios básicos y se han cubierto las necesidades que han manifestado, con el propósito de que su estancia sea digna”. La mañana de ayer, migrantes africanos y haitianos escaparon del área de confinamiento y llegaron hasta el portón del recinto, donde fueron replegados por militares de la Guardia Nacional, agentes del INM y guardias de seguridad privada. Las personas comunicaron su desesperación a la prensa y denunciaron las condiciones de hacinamiento y la falta de alimentos y medicinas en el interior del espacio, que el INM habilitó como una extensión del centro de detención migratoria Siglo XXI de esa ciudad fronteriza. En un boletín emitido este miércoles, el INM aseguró que brinda servicios de alimentación y médicos a las personas detenidas, las cuales “cuentan con servicio de agua potable, productos de aseo personal, limpieza y colchonetas para su descanso”, e indicó que el “albergue” cuenta con “áreas verdes”. “Dichas acciones se llevan a cabo con total apego a la política de respeto a los derechos humanos, con lo cual se reafirma el compromiso de este Instituto para colaborar a que la migración sea regular, ordenada y segura”, subrayó la institución.