En el 'cuello de botella” de México hay más de 100 mil solicitantes de refugio: WOLA
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- A raíz del acuerdo migratorio pactado en Washington con la administración de Donald Trump, el pasado 7 de junio, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador cerró el paso a los migrantes. Como consecuencia, tan sólo en lo que va de 2019 suman ya más de 100 mil los solicitantes de refugio en el “cuello de botella” de México.
De acuerdo con la Oficina en Washington para América Latina (WOLA), la Comisión Mexicana de Ayuda para Refugiados (Comar) abrió este año 48 mil trámites de refugio, pero en julio pasado ya había más de 52 mil solicitantes de asilo varados en ciudades de la frontera norte del país.
Según datos de WOLA, la mitad de los refugiados varados en el norte fueron devueltos a través del programa “Quédate en México”, mientras que la otra mitad está inscrita en las listas de espera que el Instituto Nacional de Migración (INM) supervisa en las garitas fronterizas, para agendar citas con agentes de migración de Estados Unidos.
Previo a la reunión entre el canciller Marcelo Ebrard; el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y el secretario de Estado Mike Pompeo, que se realizó hoy en Washington, WOLA recordó algunos datos sobre las medidas que fueron implementadas a raíz del acuerdo mencionado.
Planteó que en los primeros siete meses de 2019 las autoridades mexicanas detuvieron a 128 mil 485 migrantes, es decir, un incremento de 76% en comparación con el año pasado, y 84 mil de ellos fueron deportados.
De igual manera, señaló que de acuerdo con su experiencia en la observación del respeto a los derechos humanos “es poco probable que estos operativos hagan que los traficantes de personas salgan del negocio; en cambio, es probable que los migrantes tomen rutas más peligrosas para evitar las autoridades de migración y de seguridad, lo que los expondrá a más delitos, como asaltos, secuestros y violaciones”.
Añadió: “Estados Unidos y México están revisando las políticas de contención migratoria que están alterando el debido proceso, violando las leyes nacionales e internacionales, y poniendo a decenas de miles de solicitantes de asilo en peligro de violación, secuestro y ataque mientras esperan sus audiencias en México, un país que está pasando por niveles históricos de violencia”.
Finalmente, recordó que la organización Human Rights First documentó más de 110 casos en los que solicitantes de asilo extranjeros fueron víctimas de delitos violentos después de ser devueltos a México.