CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Una investigación realizada por la fundación Changing Markets, Proyecto Alimente y ContraPESO arrojó que la harina de maíz Maizena Natural no está enriquecida por vitaminas ni minerales. Asimismo, otros productos en México de la marca Maizena de la empresa Unilever están fortificados inadecuadamente de zinc, hierro y vitaminas, detallaron las tres organizaciones en un comunicado. “Unilever, una de las empresas de producción de alimentos más grande del mundo, está incumpliendo sus compromisos de nutrición concertados a nivel global”, expusieron las organizaciones, que dieron a conocer el reporte, de manera simultánea, en Europa y en México. Unilever se posicionó en el segundo lugar del Índice de Acceso a la Nutrición 2018 –Access to Nutrition Index- y declaró que fortifica aquellos productos populares más asequibles donde prevalecen problemas de mala nutrición, como en México. La empresa ha afirmado en su página web de la marca Maizena que desde 1990 “sus productos de maíz son voluntariamente enriquecidos con vitaminas y minerales”. Según una investigación sobre salud y bienestar hecha por Euromonitor International 2018, las ventas globales de alimentos y bebidas fortificados y funcionales del Grupo Unilever fue de 190 millones de dólares en 2018 y prevé crecer 24% en los próximos 5 años. “A pesar de esto, el reporte de la Changing Markets reveló que hay una falta de consistencia entre los compromisos internacionales, pactados por Unilever, en cuanto a la fortificación de sus productos y sus prácticas de negocios en el país, a través de la marca Maizena”, añadió.

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En México, la deficiencia de micronutrientes es un serio problema de salud pública. Uno de cada 4 niños menores de 5 años sufre anemia (deficiencia de hierro) y 9 de cada 10 mujeres no consumen suficiente hierro en su dieta. Maizena Unilever es consumida en el 90% de los hogares mexicanos, pero de los productos analizados en América Latina, sólo en México no se adicionan micronutrientes a la Maizena natural. “De acuerdo al reporte, tan solo se agregan micronutrientes a los productos saborizados –atoles Maizena de sabores—los cuales resultan menos saludables por el nivel de procesamiento e ingredientes. Sin embargo, ni siquiera estos productos están siendo fortificados correctamente, tienen 15% menos en hierro y 9% menos en zinc, en promedio. Ana Larrañaga, coordinadora de la Coalición ContraPeso, resaltó que las organizaciones de la sociedad civil, en México, demandarán acciones ante estos resultados. “La población mexicana enfrenta una doble carga de malnutrición. Por un lado, existe una mayor oferta y producción a productos no saludables que causan obesidad y enfermedades crónicas, mientras que, por otor, las industrias fallan en fortificar adecuadamente sus harinas, dejando en una gran desventaja a las familias en riesgo de desnutrición”, añadió.