NACIONES UNIDAS (proceso.com.mx).- En su participación en el plenario de la Asamblea General de la ONU, el canciller Marcelo Ebrard llamó este sábado a la comunidad internacional a dar la batalla en contra de la supremacía blanca, a fin de evitar que esta ideología siga expandiéndose en el mundo. En su intervención a nombre de México durante la sesión 74 de la Asamblea General, Ebrard mencionó que la masacre ocurrida en agosto pasado en El Paso, Texas, en que un asesino hizo blanco específico de mexicanos, está inculcada en la ideología de la supremacía blanca. Por ello, el canciller pidió a la comunidad internacional “dar de frente la batalla cultural, la batalla civilizatoria, para impedir que sigan expandiéndose estas ideas que ponen en tela de juicio el basamento mismo de nuestra convivencia en nuestros países y a escala global”. El canciller mencionó que el agresor de El Paso fue inspirado por la masacre en Christchurch, Nueva Zelanda, ocurrida en marzo pasado, en donde fueron ultimadas 51 personas que asistían a un servicio religioso en una mezquita. “Tenemos que tomar conciencia de que el supremacismo blanco, que las ideas del reemplazo de las civilizaciones están ya teniendo una conexión muy evidente, como lo señaló también el secretario general, y por lo tanto tenemos que sumar esfuerzos para hacerle frente”, enfatizó. Informó que México va a estar participando de manera resuelta con otros países a fin de enfrentar esta amenaza a la convivencia y a la existencia misma de las democracias. El canciller destacó además que a México le interesa impulsar un “multilateralismo eficaz” que sea capaz de sortear los retos a la convivencia global. Por ello, explicó, México presentó su candidatura al Consejo de Seguridad de la ONU. En ese sentido, indicó que la participación de México estaría basada en sus principios de política exterior, basados en la no intervención, la autodeterminación de los pueblos y la solución pacífica de las controversias. Indicó que México se opone al bloqueo a Cuba, y promueve en cambio que las diferencias se resuelvan con base en la política y no en la fuerza. Asimismo, llamó a la comunidad internacional a redoblar el paso en torno a la crisis climática en el mundo. Resaltó asimismo los esfuerzos de México para impulsar el desarrollo de Centroamérica, a fin de disminuir la emigración forzada de esa región. Esos esfuerzos incluyen la creación de 60 mil empleados en la región, precisó. En un par de ocasiones, Ebrard subrayó que “México ha recobrado la confianza en sí mismo”, con la llegada del nuevo gobierno, que se enfoca en combatir la pobreza, la desigualdad y la corrupción.