CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La práctica de la subcontratación laboral, conocida como outsourcing, pretende eliminarse mediante una serie de reformas que evite los abusos laborales y la defraudación fiscal, anunció este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador.

La subcontratación, mecanismo por el que están contratados alrededor de 4 millones 600 mil personas, sería eliminada al regular la contratación de personal, los servicios especializados y obras especializadas, así como las agencias de colocación.

El proyecto fue presentado durante la conferencia de prensa presidencial, en la que se explicó que la propuesta incluye modificaciones a las leyes Federal del Trabajo, del Seguro Social, del Infonavit, del Impuesto Sobre la Renta y del Impuesto al Valor Agregado, así como al Código Fiscal.

La secretaria del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde, dio a conocer que, de aprobarse la reforma, quedará prohibida la práctica consistente en la contratación de personas para que estas trabajen para una empresa en beneficio de otra.

Alcalde Luján expuso que con la reforma ya no podría haber empresas que simulen relaciones laborales y que cuenten con trabajadores contratados por un tercero, recordando que la autorización de esa fórmula de trabajo fue aprobada en la Reforma Laboral, realizada al cierre del sexenio de Felipe Calderón.

Entre los abusos laborales frecuentes, expuestos por la funcionaria, destacan el despido masivo de personal en diciembre y su recontratación en enero, práctica que evita el pago de aguinaldo y que los trabajadores generen antigüedad.

En tanto, respecto a lo fiscal, las empresas dedicadas al outsourcing, incurren en defraudación fiscal y pago de cuotas al Infonavit.

Respecto a la subcontratación, el presidente López Obrador añadió que fue proyectado como un mecanismo para facilitar trámites a empresas que se dedican a producir, pero en los hechos, se abusó.

El mandatario firmó ahí la iniciativa que será presentada al Poder Legislativo, con la idea de que se realicen las diferentes reformas que empaten las leyes y ordenamientos antes mencionados.

El outsourcing fue autorizado con la reforma laboral de octubre de 2012, en el último trimestre del sexenio de Felipe Calderón, pero fue presumida, inclusive en la publicidad oficial del gobierno de Enrique Peña Nieto, como la primera reforma estructural surgida del llamado Pacto por México, la reunión de las principales fuerzas políticas -PRI, PAN y PRD- mayoritariamente de contenido económico.