CIUDAD DE MÉXICO (apro).- La Asociación de Escuelas Particulares de Educación Media Superior y Superior anunció un plan para regresar a clases semi presenciales aunque siga la pandemia de SARS-CoV2 causante de covid-19, el cual presentará próximamente a la Secretaría de Salud de Baja California.

En conferencia de prensa, el presidente de la asociación, Jesús Ibarra, puntualizó que la idea es que, en principio, la mitad de los alumnos vaya a los planteles una semana o cada quince días y se roten con la otra mitad de estudiantes. La otra parte del tiempo seguirá en clases virtuales.

“Pudiera ser una semana del 50% de los alumnos y la siguiente semana el otro 50% de los alumnos restantes y en ese lapso aquellos que no asistan presencialmente, obviamente tendrían clases virtuales o trabajos y tareas”, añadió.

Además, se aplicarán los protocolos sanitarios para detectar síntomas de covid-19, añadió.

La intención, dijo, es otorgar una atención más personalizada a los estudiantes, después de varios meses de clases virtuales, pues en algunos casos no se han dado los resultados esperados, debido a que algunos alumnos han tenido problemas con sus equipos de cómputo y el servicio de internet.

Asimismo, reveló que al inicio del ciclo escolar temían que muchos alumnos prefirieron cambiarse a escuelas públicas, vieron que solo lo hizo el 10% de su matrícula, debido a que la educación brindada era mejor a pesar de ser virtual.

El costo de las clases virtuales

Ibarra aseguró que la propuesta fue avalada por los padres de familia y por los alumnos, quienes, dijo, han manifestado que les salió más cara la educación a distancia que la presencial porque diariamente gastan 100 pesos en el uso de datos para navegar por internet desde su celular.

“Desafortunadamente no todas las familias cuentan con esos dispositivos electrónicos, ya sean teléfonos celulares, Ipads, computadora, para poder conectar correctamente a las clases virtuales. Nosotros proponemos que el gobierno o la autoridad proporcione estos dispositivos”, señaló.

Ibarra explicó que las clases virtuales tampoco representaron un ahorro para las escuelas privadas, pues tuvieron que invertir en plataformas para impartirlas, además del internet, a lo que se sumó la capacitación del personal docente de las preparatorias y universidades.

“No estaban totalmente actualizados en el tema de tecnologías de la información y la capacitación”, admitió.