CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Las empresas no esenciales que se rehúsen a cerrar en la contingencia sanitaria podrán ser clausuradas e incluso investigadas por "posible delito", advirtió el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell. En la conferencia vespertina, el funcionario detalló los resultados del operativo de inspecciones federales para supervisar el cumplimiento del cierre de actividades no esenciales para seguir la instrucción de que las personas se mantengan en casa y evitar la propagación del covid-19. Del total de empresas inspeccionadas del 3 al 14 de abril, el 50% sí cerró mientras que un 18% tenía actividad esencial. Al 17% que se le ordenó cerrar accedió, mientras que otro 15% no accedió. “No es culpa de los trabajadores, sino que sus empleadores no están acatando una medida que es de orden general y es una disposición extraordinaria sumamente importante”, dijo.

Por rubro

De las empresas no esenciales que se negaron a cerrar, el 25.78% pertenece a la industria automotriz; un porcentaje idéntico corresponde al agrupado en el rubro “otras actividades”: industria aeroespacial, maquinado industrial, celulosa y papel, tabacalera y construcción, entre otras. El 21.09% se dedica al comercio o distribución de productos no esenciales (tiendas departamentales, calzado, papelería, decoración); 17.97% es de la industria textil y 9.38% de la industria maderera. López-Gatell advirtió que a todas las empresas que se nieguen a cerrar se les levantará el acta de inspección en materia de seguridad y salud en el trabajo, lo que da inicio al proceso sancionador. Luego se dará vista a la autoridad sanitaria para que realice el procedimiento correspondiente a la clausura, y después se dará vista al ministerio público para que se realice la investigación sobre posible delito. “Aquí estamos hablando de un daño a la salud que puede costar la vida”, aseveró.