CIUDAD DE MÉXICO (apro). - En medio de la crisis sanitaria desatada por la pandemia de covid-19, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) alertaron que “grupos criminales” están ofertando medicina falsa para combatir el nuevo coronavirus. “Las recientes incautaciones de suministros médicos falsos que se comercializan como protección contra covid-19 subrayan la necesidad de abordar un creciente comercio internacional de productos farmacéuticos falsificados que cuesta miles de millones al año y pone vidas en riesgo”, advirtió la OCDE. De acuerdo con el reporte, los antibióticos, medicamento para la potencia sexual, analgésicos, malaria, diabetes, enfermedades cardíacas, suplementos, alergias, cáncer, VIH y contra la epilepsia, son los que más se falsifican. La OCDE explicó que, al no contar con la cantidad correcta de ingrediente activos, el efecto del medicamento se anula. En los casos más graves, se rellenan con sustancias no autorizadas, lo cual, puede ser letal para muchos pacientes. Estimaciones de las instancias internacionales, estiman que, el tráfico ilegal de medicamento, alcanza los 4 mil millones de euros al año. “Los grupos criminales pueden traficar medicamentos de calidad inferior o robar productos farmacéuticos legítimos destinados a hospitales para vender en la calle a precios reducidos, a menudo almacenándolos en malas condiciones que reducen su efectividad”, aseveró el secretario general de OCDE, Ángel Gurría. Además, la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos y la Organización Mundial de Aduanas, reconocieron que, en el caso de la incautación e intercepción de pruebas falsas de covid-19, de máscaras faciales, y desinfectante para manos se dificulta, ya que, el 96% de estos productos, reciben un etiquetado inadecuado de parte de las empresas de paquetería. Las medicinas falsas se originaron en la India, un tercio en China, y los destinos con mayor tránsito, son Estados Unidos, Singapur y Hong Kong, que, a su vez, son cadena de suministro de Emiratos Árabes Unidos, Egipto, Camerún y Turquía. Con información de Manuel Alejandro Godínez López